Ernesto de Hannover quiere instalarse en España y busca piso en Madrid

Cuando aún estaba con Carolina de Mónaco, muchos años ha, pero de quien no se ha podido divorciar, si Ernesto de Hannover y su familia monegasca pisaban Madrid se acababan instalando en el Orfila, un lujoso hotel en la zona de Alonso Martínez que, sin embargo, no tiene el oropel y se aleja un poco de otros grandes hoteles del circuito por su discreción. Ahora, el aristócrata, que parece recuperado de una de sus etapas más díscolas, busca piso en la capital de España, que considera el lugar ideal para retirarse y disfrutar de su familia y de su nuevo amor.

Este pasado verano, el jefe de la depuesta Casa Real de Hannover, poco después de ser condenado a 10 meses de cárcel, a no beber alcohol y a alejarse durante 3 años de su residencia por agredir e insultar a varios agentes de seguridad en estado de ebriedad, ingresaba en una clínica de desintoxicación, la cual no le fue especialmente bien, dado que en menos de una semana ya había "huido" para beberse unas cuantas cervezas.

Decidió hacerlo en un conocido chiringuito de Ibiza. En la isla balear estaban esperándole su hijo Christian con su nuera, Alessandra de Osma, y los dos nietos del matrimonio, Nicolás y Sofía, que ya tienen un año de edad. Hay que recordar que precisamente es con Christian con el único de sus hijos con el que mantiene el contacto, dado que raramente se le suele ver con Alejandra -su única hija con Carolina de Mónaco, nacida en 1999- y a su primogénito, Ernesto Augusto, acabó demandándole por un castillo.

Tras Ibiza, decidió regresar a Austria... Pero algo había en España que le llamaba poderosamente. Algo que en octubre se supo: el amor. Ernesto de Hannover era cazado por 20minutos dando un romántico paseo frente al hotel Wellington, cerca de la puerta de Alcalá, con la hija de Pitita Ridruejo, Claudia Stilianopoulos. Esta fue el último pro en una hipotética lista de pros y contras para trasladarse a nuestro país.

Tal y como informan desde Vanitatis, Ernesto quiere hacer de Madrid su residencia habitual, dado que aquí cree haberlo encontrado todo, empezando por un tejido familiar fuerte y que le arropa, como se puede ver en sus paseos por el Parque del Retiro con su hijo, su nuera y sus nietos, en cuya casa ahora mismo se aloja. Además, también le ha pedido consejo a sus consuegros, Felipe de Osma y Elizabeth Foy, que desde hace unos años viven en un piso en el barrio de Salamanca.

Por eso mismo ya se está planteando, para seguir cuidándose como hasta ahora y no recaer en sus vicios, para estar cerca del único hijo con el que tiene una relación fluida (y con sus nietos recién nacidos), y para continuar con su historia de amor con la hija del que fuera embajador de Filipinas en Londres y Madrid, José Manuel Stilianopoulos, y de la socialité Pitita Ridruejo, pagar alrededor del millón y medio de euros que puede costar un piso en uno de los barrios de clases altas de la capital.