Así ha cambiado Cristina Soria: de su experiencia como periodista con Álex Lequio a ser la 'coach' de Mediaset
- La asesora zaragozana colabora desde hace una década en los platós de Telecinco como profesional del 'Coaching'.
- Soria también es formadora, conferenciante, escritora y periodista.
Cristina Soria se ha convertido en uno de los rostros más conocidos de los platós de Sálvame y Sábado Deluxe por las colaboraciones que desempeña desde una década como coach, asesorando a compañeros como Mila Ximénez o Terelu Campos. "Hay personas que tienen el don de saber ayudar a los demás y tú eres una de ellas", le llegó a agradecer la hija mayor de María Teresa Campos.
En los programas de Mediaset participa, además, interpretando el lenguaje corporal, los gestos y el comportamiento de diferentes famosos, por lo que sus análisis suelen despertar la curiosidad de gran parte de la audiencia.
Tanto es así que en 2019 llegó a conducir el espacio Ayuda-te, cambia tu vida, en el que recibía a los espectadores para que compartieran sus problemas cotidianos, los cuales suelen generar un malestar general entre la población.
Asimismo, Soria no siempre ha trabajado como orientadora, pues sus primeros pasos los dio como periodista; y también ha desempeñado las labores de formadora, conferenciante, escritora y presentadora.
La decisión de convertirse en coach -se formó en 2008 en Coaching e Inteligencia Emocional- se la propuso su marido, Alberto Díaz Cabezón, uno de los directores de Sálvame y con el que tiene dos hijos. Y es que, tal y como ha contado ella misma en varias ocasiones, a su hija le provocaron una hemorragia cerebral durante el parto.
Esto fue un golpe duro para la coach, que tuvo que cogerse una excedencia en el trabajo y pasar un año cuidando a su hija. "Mi hija ha sido un milagro. No ha tenido ninguna secuela. Lleva su válvula de por ida que la mantiene bien y hace una vida totalmente normal", contaba al respecto la zaragozana en la presentación de su programa.
Antes de dedicarse al mundo de la salud mental, Soria tenía sentía vocación por el mundo de la comunicación. Es por ello que en 1993 se trasladara a Madrid para estudiar Periodismo.
En la capital española comenzó a trabajar en radio y continuó su carrera como reportera de asfalto, llegando a "enfrentarse" incluso con un pequeño Álex Lequio, que defendía a su madre, Ana Obregón, de los fotógrafos y periodistas. Durante más de 10 años trabajó en el departamento de Comunicación y Marketing de una multinacional.