Britney Spears pospone su boda con Sam Asghari hasta que se dé una importante condición

Britney Spears y su novio Sam Asghari.
Britney Spears y su novio Sam Asghari.
GTRES
Britney Spears y su novio Sam Asghari.

Los planes de futuro de Britney Spears y su novio, Sam Asghari, son amplísimos, comenzando por la boda que tienen prevista desde que se comprometieran el pasado mes de septiembre después de un lustro juntos. Sin embargo, tanto formar una familia con él, como la mudanza a otra mansión o como cualquier otra idea que tengan en la cabeza va a esperar por una condición sine qua non la artista de 39 años no pasará por el altar: recuperar el control de su vida.

El próximo 12 de noviembre la autora de éxitos como Toxic tiene una nueva audiencia con la justicia para saber si tendrá o no que seguir bajo tutela legal, aunque esta no la ejerza ya su padre, James Spears. Informa el portal de noticias TMZ que ni Britney ni Sam han comenzado siquiera a pensar en el acuerdo prematrimonial porque quieren saber antes cómo de libre va a ser la cantante en los próximos años.

Son ya muchas personas las que han pedido directamente que se ponga fin después de más de 13 años a la tutela que se ha ejercido sobre Spears, más allá, claro, de toda la campaña mediática de #FreeBritney que se ha visto fuera de la corte y en redes sociales. Sin embargo, el juez podría considerar que Britney Spears necesita una evaluación mental antes de decidir sobre su futuro, por lo que es este punto el que está retrasando nuevamente la vida de la artista y su pareja.

Como no es probable que la decisión se tome inmediatamente, Britney Spears ha admitido a través de sus redes sociales que tiene "miedo". "Voy a ser honesta y decir que he esperado tanto tiempo para liberarme de la situación en la que me encuentro que ahora que está tan cerca tengo miedo de hacer cualquier cosa porque temo cometer un error", ha escrito.

"Durante años siempre me han dicho que si triunfaba esto se podía acabar... ¡Pero nunca lo hizo! Trabajé y trabajé, y ahora que está aquí el final, aunque estoy muy feliz, hay demasiadas cosas que me asustan", añade la princesa del pop, que admite que está cansada de los paparazzis que la acosan y que a veces son tan temerarios, saltando sobre su coche, el cual no había podido coger hasta hace cuatro meses, que le da miedo hacer algo mal y que eso influya en el juicio.

Spears finaliza con unas palabras que suenan a desahogo futuro: "No he hecho nada para que me traten como lo han hecho en los últimos 13 años. Estoy asqueada del sistema y desearía vivir en otro país. ¡Señor, ten piedad de las almas de mi familia si alguna vez concedo una entrevista! Mientras tanto me mantendré alejado del negocio [de la música], que es todo lo que he conocido en mi vida...".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento