"La soberbia es mala consejera". Con esta frase, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, lanzó esta semana una advertencia al Gobierno de coalición de cara a la negociación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, los segundos del Ejecutivo bicolor. PSOE y Unidas Podemos salvaron la semana pasada el primer escollo para aprobarlos al lograr que sus socios parlamentarios no presentasen enmiendas a la totalidad, pero ahora deberán remangarse y negociar las parciales, entre las que destacan muchas por su curiosidad: desde la creación de una decena rotondas, hasta la rehabilitación de castillos, conventos y acantilados, pasando por el impulso al occitano.

Una vez superado el debate de totalidad y según marca el calendario del Congreso, el proyecto de Presupuestos se estudiará en una ponencia que tendrá que estar finalizada antes del viernes. Después, se debatirá en la Comisión del ramo, en la que se estudiarán las enmiendas parciales, de cara a que la Cámara Baja dé el 'ok' definitivo a las cuentas la última semana de mes. Para que eso suceda, el Gobierno, que cuenta con 155 escaños, aspira a sumar los 13 de ERC, los seis del PNV y los cinco de Bildu. Después las cuentas pasarán al Senado.

ERC, PNV y Bildu exigen a Sánchez enmiendas por casi 1.800 millones de euros en los presupuestos

Por ahora, Sánchez ya ha acordado ciertas exigencias con dichas formaciones: con ERC, que la nueva Ley del Audiovisual reserve un 30% de cuota para idiomas oficiales que no sean el castellano y con el PNV, la cesión de la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV). Sin embargo, no fueron las únicas condiciones. Como informó este miércoles 20Minutos, las tres formaciones -que ya apoyaron las cuentas para este año- exigen a Sánchez casi 1.800 millones de euros en enmiendas.

Montmeló, tranvía en Alicante y un juzgado en Formentera

Los republicanos catalanes suman 1.200 millones. Con ese dinero, pretenden que el Estado financie los más casi once millones y medio de euros que costará la creación de una decena rotondas -y la mejora de otra- en localidades como Montferrer, Vilafant, Ball de Boi o Vallcaneres. ERC también solicitan 100.000 euros -un montante que se repetiría en los próximos dos años- para rehabilitar castillos de entre los siglos X y XI situados en Anoia, "la comarca medieval". "Es un proyecto muy transversal que afectaría a los 33 municipios de la comarca y que mejoraría la atracción turística e histórica vinculada a estos monumentos", reza la enmienda.

Asimismo, se piden tres millones de euros para obras en el entorno de río Segre, principal afluente del río Ebro y protagonista de la "confluencia fluvial más grande de la península"; dos millones y medio de euros para la llegada de agua potable a varios municipios y 850.000 euros para encauzar la Riera de Teià, en Barcelona. También destaca la petición de destinar dos millones y medio al desmantelamiento de minas antipersona "en aquellos países a los cuales el Estado haya vendido este tipo de munición", la ejecución de un proyecto de caminos rurales en la comarca del Pallars Sobirà por casi siete millones y el impulso al occitano o aranés, que se convirtió en 2010 en la tercera lengua oficial de Cataluña, con alrededor de 5.000 hablantes. El grupo de Rufián propone destinar casi 200.000 euros para impulsar su uso y darle clases a los técnicos de Hacienda para que lo aprendan.

Otras de las demandas de ERC pasan por destinar 31 millones de euros para la "actualización y mejora" del Plan de Emergencia Nuclear de Tarragona; 16 millones en los próximos cuatro años para que el Circuito de Montmeló mantenga "sus principales eventos deportivos o 100.000 euros para potenciar el festival de Torroella, que cumple este año su 40 aniversario. 

El Gobierno prevé recaudar un 8,1% más en impuestos el año que viene, gracias a la recuperación económica y del empleo

Además, los republicanos no solo registraron enmiendas para Cataluña, sino que también lo hicieron para autonomías limítrofes, como la Comunidad Valenciana o las Islas Baleares. Sin ir más lejos, solicitan 120 millones de euros para recuperar el servicio de tranvía que conectó los municipios alicantinos de Muchamiel y San Juan entre 1940 y 1969; 20 millones para que la autonomía que dirige Francina Armengol financie el transporte público terrestre y otros 50.000 euros para redactar el proyecto que implante una nueva sede judicial en Formentera.

Ayudas para cine en euskera o el soterramiento del ferrocarril

Lejos de los 1.200 millones pedidos por ERC están los casi 200 del PNV. Los nacionalistas vascos solicitan, por ejemplo, 12 millones de euros para recuperar una línea de ayudas que creó el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que entre 2009 y 2011 dio subvenciones a producciones audiovisuales que se grabasen en "lenguas oficiales distintas al castellano". También piden 850.000 euros para estudiar el soterramiento del ferrocarril de Tolosa, en Guipúzkoa; casi dos millones y medio para construir un puente sobre el río Zadorra, otro afluente del Ebro; y cerca de un millón y medio para convertir en un museo el castillo de Amaiur.

Rehabilitación de un convento y estabilización de un acantilado

La cuantía solicitada por Bildu en sus enmiendas parciales es de unos 430 millones, aunque la mayoría (360) son para Basquevolt, una fábrica de baterías para la automoción y el transporte eléctrico que se instalaría en Álava. Más allá de esa inversión, la formación solicita alrededor de dos millones y medio de euros para la redacción del estudio informativo de la mejora de infraestructuras ferroviarias entre Burgos y Zaragoza y otros tres millones para la restauración del Horno Alto Sestao. Bildu pretende que el Ejecutivo vasco obtenga la cesión de la fábrica más importante de Altos Hornos de Vizcaya, la mayor empresa española durante gran parte del siglo XX, para que se convierta en un museo. 

Asimismo, piden casi tres millones para rehabilitar el convento de San José que hay en Zumaia y otros cuatro para convertir en un espacio verde la cantera Atxarte, en Abadiño. Además, presupuestan en tres millones y medio la estabilización del acantilado de Getaria, "que delimita el casco urbano del municipio con la playa de Gaztetape, en Guipúzcoa".