Una herramienta "pionera" permite a la Guardia Urbana de Barcelona detectar violencia machista no denunciada

La Guardia Urbana de Barcelona se ha dotado de una herramienta para que haya menos casos de violencia machista que se le escapen porque la víctima no denuncia. Se trata de una guía que permite a las patrullas detectarlos cuando realizan intervenciones, especialmente en domicilios. Esta incluye más de 30 indicadores en los que deben fijarse, que hacen referencia, por ejemplo, al aspecto y actitud de la posible víctima o el posible agresor, al estado en que se encuentra su vivienda o a los testimonios de los vecinos.

El teniente de alcaldía de Seguridad y Prevención, Albert Batlle, y la teniente de alcaldía de Derechos Sociales, Justicia Global, Feminismos y LGTBI, Laura Pérez, han señalado este lunes que se trata de una guía "pionera" entre las policías locales. Han explicado que pretende detectar incluso "la violencia más oculta y sin consecuencias penales" y poder abrir diligencias informativas. En caso de que se descarte un caso de violencia machista pero se acredite que una mujer es vulnerable, se le ofrece la asistencia de los servicios sociales. 

Desde el pasado marzo, con la ayuda de la guía, ha informado la subinspectora Gemma Alfonso, los agentes han destapado 208 casos de mujeres con indicadores de vulnerabilidad. De estas, 78 ya están vinculadas a la red municipal de atención a las violencias machistas. Cuatro han rechazado ayuda y el resto de casos están pendientes de ser tratados o se han cerrado porque se ha descartado que exista una situación de vulnerabilidad.

Algunos de los indicadores de alerta que recoge la guía son que la posible víctima tenga dificultades de concentración, descuide su higiene e imagen personal, hable con miedo si su pareja está presente o tenga lesiones. Otros son que el que podría ser el agresor no deje sola a la mujer con los agentes, tenga antecedentes policiales, la culpe a ella o se muestre desafiante o excesivamente dócil o cooperante. También se comprueba si los agentes ya han acudido anteriormente a la vivienda por incidentes, se observa si en la casa hay objetos rotos y se tiene en cuenta lo que explican los vecinos. Además, si hay menores en el domicilio, los agentes se fijan en aspectos como si muestran temor, van limpios o llevan ropa adecuada a las condiciones climáticas.

El intendente Sergi Amposta ha explicado que este último fin de semana se ha requerido a la Guardia Urbana en siete ocasiones por violencia machista. "Cuatro eran casos muy evidentes", por lo que se detuvo a los agresores, ha dicho. Sin embargo, los otros no lo eran tanto y al menos en dos de ellos, el cuerpo policial abrió diligencias informativas tras seguir las indicaciones de la guía. Amposta ha contado que en ambos casos vecinos llamaron a los agentes tras oír o presenciar discusiones de parejas. En el primero, cuando llegaron, el hombre se había ido y la mujer no quiso denunciar. En cuanto al otro caso, cuando se presentaron en el lugar, la discusión había terminado y los miembros de la pareja le restaron importancia, pero dieron "versiones contradictorias".

Esta guía forma parte de un nuevo procedimiento de la Guardia Urbana ante posibles casos de violencia machista en el ámbito del hogar. En este marco, se ha creado la figura de un agente referente en este tipo de agresiones en cada uno de los 10 distritos de Barcelona. Esta decena de efectivos analizan los incidentes que han gestionado las patrullas gracias a la guía de indicadores y hacen seguimiento de los posibles casos no penales. 

También se coordinan con el Grupo de Atención a la Víctima de los Mossos d'Esquadra y forman parte de la comisión permanente de gestión de casos de violencia machista, que se reúne cada dos semanas. Además, informan a los servicios sociales especializados en el asunto.

La comisión permanente es un espacio donde se comparte información para trabajar contra la violencia machista, en el que participan la gerencia municipal de Prevención y Seguridad, organismos dependientes de la Dirección de Servicios de Feminismos y LGTBI del Ayuntamiento, servicios sociales, la Dirección de Servicios de Prevención del consistorio, la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra. Actualmente, está en funcionamiento en Sant Martí, Horta-Guinardó, Sant Andreu y el Eixample y está previsto que se ponga en marcha gradualmente en los demás distritos, hasta llegar a la totalidad en febrero o marzo de 2022.

El nuevo procedimiento de la Guardia Urbana está integrado en el plan municipal de prevención, detección y atención de las violencias machistas 'Te acompañamos'. El pasado diciembre se presentó una Medida de Gobierno para que este abarcara todas las actuaciones contra esta problemática.

El SEM atiende los casos con un modelo de "respuesta inmediata"

El Sistema d'Emergències Mèdiques de Catalunya (SEM) ha destacado este lunes el modelo de atención a las personas con sospecha de violencia sexual que pone el foco en dar "una respuesta inmediata centrada en las necesidades" de la persona afectada que se encuentra, según el SEM, en situación de máxima vulnerabilidad, ha informado la Conselleria de Salud en un comunicado.

Este procedimiento, activo desde el 15 de septiembre, tiene el objetivo de ofrecer un "acompañamiento integral" a la persona durante todo el proceso de asistencia posterior a la agresión procurando que tenga un único interlocutor para evitar que se produzca la revictimización, es decir, que la víctima tenga que relatar los hechos varias veces.

En este modelo, la atención psicológica a la víctima de violencia sexual sigue teniendo un "papel muy importante, como hasta ahora, para crear un entorno de confianza y seguridad" durante las primeras horas posteriores a la agresión.

Cuando es preciso atender de forma presencial, se prioriza que la asistencia la lleve a cabo un profesional del mismo género que la persona afectada y, además, el SEM está formando a sus profesionales en primeros auxilios psicológicos, al ser "a menudo" quienes realizan la primera atención.

Este procedimiento prevé que un profesional sanitario de emergencias médicas se convierta en el "único interlocutor" con la persona y transmita la información al resto de compañeros, cuerpos de emergencias y al equipo del centro sanitario de destino, de modo que la víctima no tenga que volver a contar los hechos.

De esta forma, su implementación permite "trabajar de forma transversal" con el resto de cuerpos e interlocutores sanitarios, dejando de duplicar acciones y vehiculando cada uno de los pasos, lo que para el SEM supone un salto cualitativo durante la asistencia a la persona afectada. 

Desde su puesta en marcha, el SEM ha atendido 112 casos, un 91% de los cuales han sido de mujeres y un 15%, de  menores de edad. En el 97% de las ocasiones se han atendido de forma presencial.

En cuanto a la atención psicológica especializada, el equipo de psicólogos del SEM ha realizado 29 asistencias en estos dos meses, 23 de ellas de forma presencial y seis telefónicamente.