El Gobierno matiza su compromiso para sostener que "ya se cumple" la promesa de no pagar por la luz más que en 2018

La vicepresidenta Calviño y la ministra Rodríguez conversan, este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
La vicepresidenta Calviño y la ministra Rodríguez conversan, este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
EFE
La vicepresidenta Calviño y la ministra Rodríguez conversan, este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

El Gobierno afirma que "ya se está cumpliendo" el "compromiso" de que los españoles no paguen más por la electricidad que en 2018, descontado el efecto de la inflación. Eso es, al menos, lo que dijo este martes la ministra portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, tras el Consejo de Ministros. Para poder sostener esa afirmación, el Ejecutivo ha matizado la promesa que inicialmente hizo Sánchez en septiembre, cuando la imparable subida de los precios mayoristas de la luz comenzó a acaparar titulares. Frente a ese optimismo, organizaciones de consumidores como la OCU afirman que es "imposible" que el presidente cumpla.

Rodríguez dijo este martes que "el compromiso del Gobierno se cumple" porque consiste en que "la media de los hogares españoles" paguen en 2021 "una factura equivalente a la de 2018, descontada la inflación". Pero lo cierto es que, en septiembre, Sánchez se comprometió a que "todos los ciudadanos con un consumo medio al final de 2021 paguen una cuantía semejante y similar a la que pagaron en 2018, lógicamente con el IPC descontado".

La diferencia entre la palabra del presidente y lo que ahora repite el Gobierno es que hace tres meses Sánchez extendió esa promesa a "todos" los ciudadanos, mientras que la portavoz se acoge ahora a cumplirla para "la media de los hogares". Ese matiz es clave, porque todo apunta a que los consumidores acogidos a la tarifa regulada por el Ejecutivo –que es tradicionalmente más barata pero que refleja en mayor medida los picos de precios– pagarán más que hace tres años, mientras que los que tienen una tarifa libre habrían sufrido menos los recientes incrementos. Parece poco probable que "todos" los consumidores paguen lo mismo que en 2018, pero "la media" podría cuadrarle al Gobierno.

La diferencia entre ambas tarifas en este contexto de altos precios en el mercado mayorista quedó clara ya el 20 de octubre, cuando la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, afirmó en una comparecencia en el Congreso que los consumidores con la tarifa regulada habían visto incrementado su recibo medio en el primer semestre en un 6,9% con respecto a 2020, mientras que la factura de los consumidores con una tarifa libre –que habitualmente tiene precios más caros pero estables– había caído un 4,4%. 

A finales de junio, el Gobierno aprobó una rebaja temporal del IVA que aún persiste, y en septiembre aprobó un nuevo paquete de reducción de impuestos para tratar de contener la factura, por lo que los recibos de consumidores con tarifas que no dependen de los precios mayoristas habrían bajado por la menor carga fiscal. Mientras tanto, los consumidores con la tarifa regulada han estado afectados por precios en el pool mayorista que fueron en octubre en torno a un 30% más caros que en septiembre y que doblaron a los de agosto.

Los precios mayoristas en noviembre han sido sólo ligeramente inferiores a los de octubre. Este mismo martes, la electricidad marcó su segundo récord en el mercado mayorista, con 274 euros por megavatio hora. Según datos de la CNMC publicados también este martes, el recibo medio de la luz en los últimos treinta días fue un 58% más caro que hace un año y un 57,5% más que hace dos años, antes de la pandemia.

Por ello, organizaciones como la OCU señalan que es "imposible" que el Gobierno cumpla su compromiso, porque "para que se cumpliera, el precio de la electricidad debería ser 0 durante todo el mes de diciembre". Según esta organización, el hogar medio acogido a la tarifa regulada ha pagado en 2021 facturas por un importe de 830,18 euros, lo que ya supera al total de recibos de 2018. "Si todo sigue igual en diciembre, que es lo más probable, la factura de electricidad de 2021, será un 9% más cara que la de 2018, revalorización de IPC incluida", concluye la asociación.

El Ejecutivo, por su parte, insiste en que "ya se está cumpliendo su promesa" si se tiene en cuenta la "media" de los consumidores. Según datos difundidos la semana pasada por la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, actualmente hay 16,2 millones de consumidores en el mercado libre y 10,5 millones en la tarifa regulada.

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