Este 2021 ha supuesto un annus horribilis para Alba Santana y eso es innegable para cualquiera que mire las fechas. Hace seis meses, en junio, fallecía su madre, Mila Ximénez, víctima de un cáncer de pulmón, y seis meses después, este pasado día 11 de diciembre, se quedaba huérfana tras la muerte del tenista Manolo Santana a los 83 años de edad. Sin embargo, sabe de sobre que el legado de ambos siempre estará presente en el corazón de los muchos fans que tenían, tanto del deporte como del entretenimiento. En el caso del ganador de cuatro torneos de Grand Slam en individuales, su herencia no es solo su nombre, sino un importante patrimonio.
Tal y como revela el portal Vanitatis, justo antes de la pandemia, en 2019, se paró toda la actividad económica de Santana, dejando de de presentar sus cuentas en el Registro Mercantil. Eso sí, hay una única excepción, la cual no podía ser otra que uno de los grandes triunfos del pionero del tenis en nuestro país, el Manolo Santana Racquets Club de Marbella, quizá su mayor legado por todo lo que supone para el deporte en la ciudad andaluza a la que tan unido se sentía el madrileño (donde de hecho residía y lugar de su fallecimiento).
"Somos mucho más que tenis, somos un club deportivo con una gran variedad de actividades deportivas y de ocio para toda la familia en un entorno natural único y exclusivo", reza su descripción, en la que además se congratulan por sus "más de 1.000 socios al año". Desde el citado medio aseguran que pretenden dedicarle un homenaje pronto al tenista, aunque para ellos el más importante sigue siendo el continuar funcionando y que no se pierda todo lo que Manolo Santana hizo por el tenis.
Dicho referente del tenis a nivel nacional lo fundó Santana en 1997. En el momento de su muerte, el extenista era tanto el apoderado de la sociedad que gestiona el centro, denominada Racquets Club Marbella SL, como también el administrador único de Rolwin SA, otra sociedad que sin embargo se encargaba de la misma gestión, aunque ambas con cuentas bien diferenciadas.
De las cuentas públicas presentadas por la primera se extrae que contaba hasta 2019 con un patrimonio activo de casi 85.000 euros, así como unos ingresos de algo más de 423.500 euros. Y eso que dicho último año fue uno de los pocos en los que obtuvo beneficios (29.051 euros, en números rojos), partiendo de la base de que el año anterior, 2018, la economía de la empresa presentaba un balance negativo de -46.584 euros.
La sociedad Rolwin, por su parte, sí que presentó una solvencia mayor que la anterior. Al menos, en lo que respecta al 2019, ya que ese año el patrimonio activo era de 174.209 euros, los ingresos de poco más de 75.100 euros y los beneficios netos de casi 18.500 euros. Como curiosidad, esta compañía tiene como sede social y número de teléfono el mismo Manolo Santana Racquets Club de la ciudad malagueña.
Y no son estas las únicas empresas en las que se aventuró, dado que en 1990 llegaría a fundar Reysan Sociedad Deportiva, su salto dentro de la promoción inmobiliaria, aunque su recorrido fuera corto: en 1995 echaría el cierre. Por último, informa el citado medio, Manolo Santana estuvo dentro de la ISO, siglas de la International Sports Organitation, una compañía que tenía como principal accionista al Grupo Zeta y que tenía labores de divulgación del deporte.
Pero más allá de las empresas que tenía o que tuvo, así como dejando de lado su mansión en Marbella, lo cierto es que el legado de Manolo Santana estará ligado siempre a su ciudad natal con la pista que lleva su nombre en la Caja Mágica. En dicha pista se juega parte del que fue su último gran sueño deportivo: que Madrid tuviese un gran torneo de tenis, el Mutua Madrid Open, del cual además él era Presidente de Honor.
Para saber cómo funciona la competición es importante saber que quien lo gestiona es una empresa que pertenece a otro extenista, Ion Tiriac, ahora reconvertido en magnate. Este exjugador rumano tiene una fundación a su nombre, que no presenta ninguna cuenta debido a sus características fundacionales, en la que Santana ejercía como presidente y patrono y que en febrero de 2020 se inscribió en la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fe Pública con un capital inicial de 30.000 euros.
"De la mano de Ion Tiriac, Santana fue una parte fundamental para lograr que Madrid acogiese una de las citas más importantes del calendario tenístico, al impulsar la celebración del Mutua Madrid Open en 2002, torneo que la próxima temporada celebrará 20 años en la capital de España. La familia del Mutua Madrid Open quiere pedir respeto para la familia de Santana y mandar un abrazo enorme a todos sus seres queridos", recordaron desde el torneo en su despedida de la leyenda.
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