El universo creado por la autora JK Rowling con su saga de libros de Harry Potter ha dado para mucho: cine, merchandising, teatro, más libros... Es tan grande la atracción que hasta el deporte ficticio que practican los magos, el quidditch, tiene su versión en la vida real.

Evidentemente, no hay escobas voladoras de por medio (aunque sí de las normales), se juega a pie y el espíritu es parecido. Por ejemplo, es mixto (los equipos de cinco jugadores no pueden tener a más de tres miembros del mismo género).

En Estados Unidos, el quidditch tiene mucha aceptación entre los jóvenes y de hecho hay dos competiciones, la U.S. Quidditch (USQ) y la Major League Quidditch (MLQ). 

Pero ahora, estas dos organizaciones han tomado una decisión radical: quieren cambiarle el nombre al deporte. Hay un motivo técnico, que es que el nombre quidditch está registrado por Warner Bros (la productora de las películas de la saga), lo cual dificulta la expansión comercial del juego.

Pero el otro motivo es sorprendente: "Las ligas esperan que un cambio de nombre les ayude a seguir distanciándose de las obras de J.K. Rowling, autora de la serie de libros de Harry Potter, que ha estado cada vez más bajo escrutinio por sus posiciones anti-trans en los últimos años".

La postura de JK Rowling sobre las mujeres transexuales

Es decir, que los fans de la obra de Rowling quieren distanciarse de la obra de Rowling por la visión de esta acerca de las personas transexuales, y por ello quieren cambiar el nombre del deporte inventado por la autora inglesa.

Desde hace más de dos años, la autora de Harry Potter está en el ojo de un huracán que circula por todo Occidente, y especialmente en Reino Unido: la controversia relacionada con las personas trans y sus derechos, especialmente el de denominarse a sí mismas con arreglo a su género sentido, en lugar del que les fue asignado al nacer.

JK Rowling se posiciona junto al grupo de feministas que considera al sexo biológico como una realidad inmutable. Entre otras afirmaciones, la autora dijo: "Cuando abres las puertas de los lavabos y los vestuarios a cualquier hombre que cree o siente ser una mujer (...) le estás abriendo la puerta a cualquier hombre que quiera entrar".