Desde que Chanel inventase el Little Black Dress (LBD) o vestido negro corto en español, todos los diseñadores de renombre se han lanzado a reinterpretarlo a su estilo. Esta prenda, atemporal como pocas, pasó de ser un símbolo de la alta sociedad a convertirse un imprescindible en todos los armarios.
Su gran atractivo reside en su versatilidad. Este vestido puede adaptarse a cualquier situación sin importar lo formal o informal que sea, ya que da un giro radical dependiendo de cómo lo combinemos o qué estilo de maquillaje o peinado llevemos. Se trata de todo un básico en el mundo de la moda.
En estas fechas solemos recurrir mucho a ellos porque sin apenas esfuerzo nos dan una imagen elegante y sofisticada. Patricia Conde es muy consciente de este efecto y ha apostado por un diseño muy favorecedor que, además, consigue que la cintura parezca mucho más pequeña.
Para el programa de Nadie al volante que presenta en #0 de Movistar, Conde se ha decantado por un diseño de punto de cuello alto y manga larga con silueta evasé de la marca Karl Lagerfeld. Este vestido cuenta con una cinta a la altura de la cintura con el logotipo de KARL que consigue que, visualmente, se reduzca la cintura. Por otro lado, las líneas verticales consiguen alargar y estilizar la figura, lo que le hacen la apuesta perfecta.
Para acompañarlo, la presentadora llevó unos zapatos de tacón transparentes de Magrit, un labial rojo y una coleta alta que dejaba apreciar al vestido en todo su esplendor. Para enmarcar el rostro, no podía faltar su eterno flequillo cortina con clara inspiración en Brigitte Bardot.
Actualmente, el vestido lo podemos encontrar disponible en la página web de Karl Lagerfeld en negro y vino a un precio de 295 euros.
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