El Ministerio de Educación aprobará el currículo de Bachillerato en enero y sin cambios pese a las quejas de Madrid

El Gobierno no modificará el currículo de Bachillerato pese a las exigencias de la Comunidad de Madrid de retirarlo por considerar que se incorporan contenidos "ideologizados" con "continuas alusiones al movimiento feminista, el compromiso social y el desarrollo sostenible". El Ministerio de Educación envió el último borrador a las comunidades a principios de diciembre, donde se plasmaron algunas modificaciones en la nueva rama General y en el derecho a la información de los mayores de edad, entre otras. Ese será, por tanto, el texto que prevén aprobar próximamente, sin plantearse más cambios pese a la revisión que ha reclamado Madrid. 

Durante la Conferencia Sectorial de Educación de este miércoles, el consejero de Educación y portavoz de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, trasladó a la ministra Pilar Alegría su profundo rechazo al nuevo decreto de enseñanzas mínimas de Bachillerato, que previsiblemente se aprobará en enero con el resto de currículos. 

Son dos los puntos a los que se opone frontalmente el consejero: asuntos concretos de la asignatura de Historia de España -cuyo contenido tacha de "fuertemente ideologizado" y en el que considera que debería hacerse más hincapié en la etapa anterior al siglo XVIII-, y a la nueva modalidad General que se incorpora en el texto. Con todo, desde Educación confirman a 20minutos que no tienen previsto redactar un nuevo borrador y que, pese a que cumplen con su deber de atender a las reclamaciones de las comunidades autónomas, el texto continuará con su tramitación parlamentaria tal y como está.

Exigen más contenidos anteriores al siglo XVIII

Según cuentan fuentes de la Consejería de Educación, Ossorio recriminó en la Conferencia Sectorial que "el estudio de Historia de España, así como otras materias, se abordan desde un prisma muy politizado", por sus "continuas alusiones al movimiento feminista, el compromiso social y el desarrollo sostenible". Asimismo, recriminan al Gobierno que "confunda el nacionalismo español" y lo sitúe "a la misma altura que otros nacionalismos del siglo XIX"; mientras consideran que se identifica a la Segunda República como "una democracia plena, destacando únicamente sus logros".

Tampoco están de acuerdo en el desarrollo del contenido de esta asignatura, que según los planes de Educación se centrará más en la etapa contemporánea. Creen desde la consejería madrileña que es "absolutamente necesario" que se incorporen contenidos como la Península Ibérica en la Edad Antigua y los visigodos, la Edad Media, la formación de la Monarquía Hispánica y su expansión mundial (1474-1700) o el reformismo de los primeros Borbones (1700-1788).

Y es que el nuevo proyecto plantea un estudio limitado a la España más contemporánea, omitiendo los acontecimientos previos a 1812, que se estudiarán durante los cursos anteriores de la etapa secundaria. "Las competencias específicas se han estructurado en torno a los vectores que vienen constituyendo los principales centros de interés en el presente, que definen las estrategias para aprender del pasado y que resultan relevantes para orientar nuestro porvenir", señala el documento. Además, con ello pretenden abordar el exceso temario que denuncian los estudiantes del último curso que deben también estudiárselo para la EBAU.

En contra de la nueva rama General 

Ossorio también criticó la nueva 'rama' General que se añade a las otras tres -Artes, Ciencias y Tecnología, Humanidades y Ciencias Sociales- con el nuevo currículo. "Es un error y una apuesta clara por desdibujar el verdadero sentido que debe tener esta etapa”, aseveran desde la Consejería. 

Esta propuesta plantea que los alumnos que opten por esta vía cursen obligatoriamente 'Matemáticas Generales' en el primer curso de Bachillerato, y 'Ciencias Generales' en segundo, lo que, según el portavoz de la Comunidad supone "un baño superficial de ambas que no le preparará seriamente para nada". El consejero considera que con esto se traslada al alumno "la sensación de un Bachillerato sin exigencias, cuya única finalidad es la obtención sin más y por sí misma del título". 

Esta nueva rama aglutina conocimientos de las otras tres, dando así a los estudiantes la posibilidad de ampliar sus opciones cuando no tienen todavía del todo claro hacia qué vía enfocar su carrera educativa.