Sale a la luz la macabra colección de osos de peluche del príncipe Andrés

El príncipe Andrés, duque de York, el pasado mes de septiembre.
El príncipe Andrés, duque de York.
GTRES
El príncipe Andrés, duque de York, el pasado mes de septiembre.

Ya se le conocía como 'Andresito el cachondo' en su época en el ejército, pero cada detalle que se va conociendo de la vida del príncipe Andrés, duque de York, resulta más estrafalario y, por su situación actual, acusado como está por Virginia Giuffre de abusos sexuales a menores dentro de la trama de tráfico de mujeres de Jeffrey Epstein y Ghislaine Maxwell, macabro: acaba de salir a la luz que tiene una amplia colección de osos de peluche que están cuidadosamente colocados en un dormitorio.

Lo ha revelado un antiguo policía, Paul Page, asignado entre los años 1998 y 2004 al equipo de seguridad que vela por la familia real británica. Como miembro de dicho dispositivo tuvo acceso a los aposentos privados del hijo de Isabel II y no se creía lo que veía, porque además su asombro no se quedó ahí, sino que fue testigo de los extremos a los que llegaba el personal de palacio para colocar esos juguetes en la misma y exacta posición en la que estaban antes de limpiar la estancia.

"Tenía unos 50 ó 60 peluches colocados sobre la cama y casi que huelga decir que había una tarjeta guardada en uno de los cajones y que el inspector jefe nos mostró: era una foto de esos mismo ositos en el mismo lugar en el que estaban puestos", ha declarado el expolicía en un nuevo documental titulado Ghislaine, Prince Andrew and the Paedophile, que se estrenará próximamente en la cadena ITV y que, como su nombre indica, se centrará en la relación del royal con la mano derecha del magnate que se suicidó y sus prácticas pedófilas.

"La razón de que existiera esa foto, que estaba plastificada, era que si las criadas no los colocaban en ese mismo orden, el correcto, él se ponía a gritar por el palacio", ha asegurad Page en una información que, además, lleva en su portada el periódico The Sun ampliada por las descripciones de exempleadas del hogar de dichos peluches.

Reino Unido se cansa

Esto se suma a una creciente ola de hartazgo del pueblo inglés contra la monarquía por las medidas un tanto laxas que se están tomando contra el duque de York, uno de cuyos concejales ha pedido precisamente que se le retire el título al príncipe Andrés.

Lo último ha sido Palacio de Holyrood, también conocido como Holyroodhouse. Perteneciente a la reina y situado en el centro de Edimburgo, ha amanecido este pasado domingo con una enorme pintada en uno de sus muros exteriores que la policía escocesa ya está investigando.

En pintura blanca y bastante grande, cualquiera que pasara cerca podía leer las palabras "Paedo home". Es decir, "hogar del pedófilo". Aunque no es una de las casas en las que más tiempo pasa la familia real, lo cierto es que se trata de un lugar histórico con más de nueve siglos de antigüedad, que es precisamente el principal argumento de los agentes encargados del caso para obtener la ayuda ciudadana: que se trata de una joya del patrimonio cultural del país antes que un atentado contra el príncipe Andrés.

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