Sánchez pide al PP que "resuelva cuanto antes" las "acusaciones cruzadas de irregularidad y corrupción"

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a pedir al Partido Popular (PP), en aras de la "estabilidad" del país, que resuelva "cuanto antes" su crisis interna, generada la pasada semana al conocerse una presunta investigación contra la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, por una comisión de 55.000 euros -Génova lo cifraba en 283.000 euros- que su hermano habría cobrado tras adjudicar la Comunidad un contrato para la compra de mascarillas por valor de un millón y medio de euros en plena pandemia.

"Espero que resuelvan cuanto antes esta crisis y que resuelvan la principal incógnita: las acusaciones cruzadas de irregularidades y corrupción que se han podido sustanciar en el Partido Popular y en algunas de las instituciones que gobiernan", ha explicado el presidente en rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa junto a la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen. En este sentido, Sánchez ha insistido en que que le vaya bien al PP también marcará si hay "estabilidad" política, que es lo que España "necesita".

Con todo, el presidente ha insistido en que el Gobierno "está centrado en gobernar" y ha dejado claro que, pese a que ciertas voces han planteado que un posible adelanto electoral le beneficiaría, la legislatura "terminará en 2023, con más empleo y tras superar la pandemia". 

Vuelve a ofrecer la abstención al PP si impone un ¨cordón sanitario¨ a Vox

El presidente también ha vuelto a ofrecer al PP la abstención del PSOE en Castilla y León si acceden a imponerle un "cordón sanitario" a Vox. "Si el PP está dispuesto a comprometerse con ese debate, el principal partido de la oposición está abierto a ofrecer esa alternativa", ha destacado justo después de la reunión infructuosa que han mantenido este lunes el 'popular' Alfonso Fernández Mañueco, ganador de las elecciones del pasado 13-F y candidato a la reelección, y Luis Tudanca, candidato del PSOE.

Ambos han mantenido un encuentro este lunes que apenas ha durado apenas 15 minutos y ambas partes se culpan de la falta de avances. Por un lado, Tudanca se ha mostrado "absolutamente estupefacto" y "tremendamente desconcertado" porque, según su versión, Mañueco ha abandonado la reunión ante la "mera mención de la palabra corrupción". Después, Mañueco ha pedido a Tudanca que "asuma su derrota" en los comicios del pasado 13 de febrero para que ambas fuerzas puedan sentarse a dialogar y ha lamentado los "rechazos, evasivas o silencios" que dice haber recibido por parte de los socialistas.