La autopsia preliminar confirma que Esther López, la joven desaparecida en Traspinedo (Valladolid) y cuyo cadáver fue encontrado en una cuneta, tenía una fractura de cadera y un latigazo cervical.
Debido a este resultado, la Guardia Civil baraja la posibilidad de que Esther fuese embestida por la espalda justo en la curva y que el golpe la proyectó hacia la cuneta donde fue encontrada el pasado 5 de febrero.
Por la altura de Esther y las lesiones, las autoridades buscan un todoterreno o una camioneta pick up. En las investigaciones, se han cruzado las antenas de telefonía y las cámaras de la carretera para centrarse en una lista reducida.
Los investigadores ya tienen práctica en investigar modelos de coches a través de los faros, pues lo hicieron en el caso de Diana Quer para llegar al vehículo de 'El Chicle'. El coche del amigo que la dejó en la carretera después de discutir con ella fue inspeccionado por dentro y aunque no había signos aparentes un golpe podría haber pasado desapercibido.
Los investigadores analizan también la ropa de Esther que, en caso de atropello, podría contener restos de pintura del vehículo, o de su interior.
De momento, la jueza mantiene la condición de investigados de los amigos de Esther. Y la directora de la Guardia Civil ha dicho que se ha avanzado mucho en la investigación "para llegar cuanto antes a los responsables o el responsable".
El móvil se apagó antes de las 6 de la madrugada por la batería o por el golpe. A falta de la autopsia definitiva y la hora de la muerte, las autoridades saben que Esther podía haberse salvado si la hubieran auxiliado.
La Guardia Civil pide tiempo
La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, ha subrayado este martes en León que la investigación sobre la desaparición y muerte de Esther López y ha pedido tiempo para poder esclarecer con total certeza lo sucedido.
En una rueda de prensa, Gámez ha asegurado que la investigación sigue avanzando y se mantienen abiertas varias líneas, pero se ha amparado en el secreto de sumario para no dar más detalles.
"Tendremos que tener un poco de paciencia para que se llegue a alguna conclusión que pueda ser comunicada cuando el juzgado lo permita", ha manifestado.
No obstante, ha subrayado que se "prospera" en los trabajos y ha dicho que lo que más debe tranquilizar a la familia es que la Guardia Civil "está poniendo todos sus medios para que esta investigación pueda arrojar cuanto antes un resultado certero sobre lo que ocurrió y quién o quiénes son los responsables".
Gámez ha precisado que tanto la Unidad Central Operativa (UCO) como la Unidad de Policía Judicial de la propia Comandancia están inmersos en la investigación y ha garantizado que se pondrán todos los medios necesarios para aclarar lo sucedido
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