Antena 3 emitió este viernes 11 de marzo el estreno de la segunda edición de El Desafío. El formato siguió poniendo al límite a todo tipo de famosos hasta el nivel de que una de las concursantes, Raquel Sánchez Silva, rompió a llorar en el primer programa. 

Se estrecha el cerco en el caso Biondo

Ocurrió después de un complicadísimo reto que la presentadora sacó adelante con sobresaliente. Sin embargo, la dificultad hizo que estallara al terminar. Se trató de la prueba de apnea, que fue para muchos la más dura también durante el debut de El Desafío.

En este caso, el reto dejó claro algo que ya se veía venir por su afición al deporte y a la vida saludable: que Raquel Sánchez Silva será uno de los grandes pesos pesados de la edición. Además, y como ya se vio en MasterChef Celebrity, aunque no durara muchas entregas, se trata de una persona muy competitiva y que se toma muy en serio los retos.

Tanto es así, que el entrenador encargado de ayudar a preparar la temida prueba se preocupó durante los días previos a la gala por si la comunicadora iba más allá de lo debido en su afán por quedar la primera, poniendo en riesgo su salud.

Por su parte, Sánchez reconoció que sentía una presión especial al ser la primera de la edición en enfrentarse al reto, aunque también vio la parte buena de esto, y es que se quitaría de encima la prueba más sacrificada. Para ilustrar su dedicación al reto, dijo que era "la primera vez" que apagaba el móvil desde que nacieron sus hijos.

La presentadora aguantó finalmente 3 minutos y 32 segundos, aunque al superar los 3 segundos el entrenador le pidió que saliera del agua. Al salir, se emocionó y lloró al abrazar al entrenador. Como era de esperar, la comunicadora se convirtió en la ganadora de la noche.