Cómo saber si me están pinchando el contador de la luz o si funciona bien
- Se trata de un delito de fluido eléctrico, según el artículo 256 de la Ley Orgánica 15/2003.
- Cortar los manguitos, perforar el depósito y otras formas que tienen los ladrones de robar la gasolina.
- El 'boom' de las placas solares en las viviendas frente al tarifazo eléctrico: "Ha sido un ahorro brutal".
Un enganche ilegal de luz o manipulación del contador eléctrico supone la "adulteración de la instalación eléctrica y alteración de la red de transporte de luz" que repercute en la factura de la luz, explican desde el comparador de tarifas de energía Selectra. Asimismo, supone un riesgo para la salud de las personas porque aumenta la posibilidad de incendio, cortocircuitos u otros problemas en un edificio.
En este sentido, pinchar ilegalmente la luz es un delito de defraudación de fluido eléctrico, según el artículo 256 de la Ley Orgánica 15/2003. Pero, ¿cómo detectar un enganche de luz en nuestro contador? ¿Cuáles son las primeras señales de alerta?
Pasos para detectar un enganche ilegal
Como detallan en Selectra, en el caso de notar de forma repentina un aumento en las facturas mensuales de la luz, puede que uno de los motivos es que alguien nos esté robando luz con un enganche ilegal. "Normalmente, los enganches, trucajes o trampas de luz se producen en la sala de contadores", añaden, y estos son los pasos para detectarlos:
- Comprobar en qué habitación o sala se encuentra el contador eléctrico.
- Anotar el consumo exacto que marca el contador.
- Bajar los plomos del cuadro eléctrico.
- Dejar la vivienda sin enganche a la energía y pasado un tiempo volver a revisar el consumo que marca el contador.
- Si ha variado, lo más probable es que alguna vivienda esté enganchada a la luz de forma ilegal.
¿Qué hay que hacer si eres víctima de un enganche?
En el caso de detectar un posible fraude eléctrico, lo primero que hay que hacer es ponerse en contacto directamente con el departamento de fraudes de la empresa distribuidora que te corresponda en función de la zona geográfica. La denuncia es completamente anónima, aunque hay que enviar toda la información posible sobre el suministro, como la ubicación concreta y el código CUPS.
Al ser un delito de fraude eléctrico, las sanciones económicas pueden oscilar entre los 1.000 y 2.000 euros. Asimismo, la sanción puede incluso suponer de 3 a 12 meses de prisión si el fraude es superior a 400 euros.
Además, "siempre que no se pueda saber con exactitud la totalidad de energía defraudada, la ley indica que la cantidad a facturar corresponderá al 100% de la potencia eléctrica contratada durante 6 horas al día en el último año", añaden desde Selectra.