La Semana Santa reaviva el aeropuerto de Barcelona: los vuelos ya son el 76% de los que había antes de la pandemia

El aeropuerto de Barcelona-el Prat vive este Jueves Santo una operación salida que poco a poco recupera el pulso de antes de la pandemia. Maletas, grandes mochilas, pasaportes, sonrisas y colas vuelven a llenar las terminales, después de dos años en que las vacaciones de Semana Santa han estado desvirtuadas por la Covid. A lo largo de toda la jornada hay programadas 848 operaciones, entre despegues y llegadas, una cifra que representa el 76% de los vuelos que había el Jueves Santo de 2019. 

A pesar de que la recuperación plena todavía queda lejos, el salto es abismal si se compara con las cifras de hace un año, cuando solo operaron 180 aviones. Hasta el lunes hay programadas 8.882 operaciones.

Del goteo intermitente de pasajeros rompiendo un silencio inquietante se ha pasado ahora a un bullicio permanente. La imagen recuerda a la actividad que tenía el aeropuerto antes de que estallara la pandemia, y deja del todo atrás dos Semanas Santas del todo inusuales, puesto que en 2020 había confinamiento domiciliario y en 2021 las numerosas restricciones también bloquearon la actividad aérea.

Será mañana viernes cuando habrá el pico de operaciones de estas vacaciones, con 872. 

"Se agradece mucho ver tanta gente que se va mientras los turistas vuelven a Barcelona", explica Federico, que viaja con su mujer y sus tres hijos a pasar unos días a Jerez. La escapada, para celebrar su 40 cumpleaños, había quedado pendiente por la pandemia y por el nacimiento de su hijo pequeño. "Todos tenemos muchas ganas de viajar y hacer cosas, puesto que hasta ahora no ha habido cierta normalidad", añade.

En la misma línea se expresa Arnau, un joven de Barcelona que viaja solo hacia Londres para ver a su hermana. Dice que los últimos dos años ha viajado menos debido a la pandemia y asegura que tiene "muchas ganas" de retomar el ritmo de escapadas y vacaciones de antes.

Quien no ha cogido ningún avión desde marzo de 2020 hasta hoy es Anna, una joven de Tàrrega que este jueves asegura sentirse "un poco novel". En su caso, volvió de hacer un Erasmus en Alemania cuando empezó la pandemia, y hasta ahora ha preferido hacer viajes solo en coche. "Ahora ya tenía ganas!", celebra, poco rato antes de volar hacia Àmsterdam para ir a ver una amiga.

Cerca, Amàlia explica que ella ha procurado mantener los viajes habituales hacia Málaga, donde vive su familia. Instalada en Barcelona por trabajo, ella asegura que se ha desplazado cuando ha tenido algunos días de vacaciones los últimos dos años y celebra que poco a poco todo el mundo vuelva a coger aviones.

Quienes también han viajado a menudo, sobre todo durante el último año, han sido Rosa Maria y Emilio, un matrimonio que este jueves ha cogido un vuelo con el Imserso en dirección a Ibiza en "busca de descanso y de poder tomar el sol". Ellos dan por recuperada la normalidad prepandemia "excepto por el uso de las mascarillas", y ya planifican nuevos viajes en los próximos meses.