Bosch negocia con Barat Alte la venta de la fábrica de Lliçà d'Amunt
- La propuesta dará trabajo a 60 de los casi 200 trabajadores actuales.
Robert Bosch negocia con Barat Alte la venta de las instalaciones de Lliçà d'Amunt (Barcelona), según ha hecho público el sindicato UGT este miércoles. La asamblea de trabajadores ha dado luz verde a este proyecto de reindustrialización, descartando otras dos propuestas que había sobre la mesa.
La UGT detalla que la fábrica de componentes para la automoción pasaría a dedicarse a la producción de componentes de cabinas de lavabos para trenes. Actualmente, en Bosch trabajan 187 personas, y el nuevo proyecto prevé 60 puestos de trabajo a partir de septiembre y hasta 2024.
La inversión prevista es de entre 5 y 6 millones de euros. El sindicato valora positivamente la reindustrialización de la fábrica a pesar de no poder garantizar el trabajo a toda la plantilla actual.
Los trabajadores han votado este miércoles las tres propuestas, de las que la opción de Barat Alte ha sido la mejor considerada por amplia mayoría. También era la apuesta del comité de empresa, explica el secretario general de UGT en la compañía, Víctor Manuel Ruiz. Los plazos para iniciar la nueva actividad, los salarios, el hecho de mantener el convenio laboral del sector y de disponer de comité de empresa son los motivos que han hecho decantar la balanza.
Sobre la cifra de puestos de trabajo que se planifican con Barat Alte, desde UGT apuntan que serán 60 nuevas plazas que complementarán la plantilla actual que la compañía tiene en Parets del Vallès. Ruiz admite que "no es el volumen de puestos de trabajo deseable" para un total de 187 personas que ahora se quedan en la calle, pero asegura que las otras dos empresas que se habían postulado todavía ofrecen menos ocupación. La proyección de futuro de Barat Alte es otro de los factores que ha convencido a la plantilla.
Hace un año, la fábrica de Bosch en Lliçà daba trabajo a 336 personas. Desde que a principios de 2021 la multinacional alemana anunció que se iba, ha habido diversas salidas voluntarias y pactadas hasta quedar los 187 empleados actuales. Entre estos se seleccionará al personal de la nueva actividad de la fábrica.
Según la UGT, con el aval de la asamblea de trabajadores, ahora la pelota vuelve al tejado de la dirección de la fábrica y de Bosch para poner en marcha con Barat Alte una auditoría que analice detalladamente la situación de la planta. Posteriormente comenzará la negociación económica para formalizar la venta.
Bosch en Castellet, en manos de GCR Group
La reindustrialización de la fábrica de Bosch en Lliçà es el segundo proceso de venta que la multinacional alemana ha afrontado en Cataluña en poco tiempo. A principios de abril, la firma cerraba con GCR Group la venta de las instalaciones de Castellet i la Gornal, que se reconvertirán en un gran centro de reciclaje y transformación de plásticos en 2023.
El proyecto forma parte de un plan de inversiones de GCR cifrado en 100 millones de euros. La previsión es dar trabajo, inicialmente, a 60 personas seleccionadas entre las 190 que se quedaron sin trabajo con el cierre de Bosch a finales del verano pasado.