Estudiantes de la UPF cierran los accesos al campus de Ciutadella en una jornada de huelga para reclamar más catalán en las aulas

  • La universidad suspende la actividad académica en el campus afectado. 
Sillas bloqueando el acceso al campus de Ciutadella de la UPF
Sillas bloqueando el acceso al campus de Ciutadella de la UPF
ACN
Sillas bloqueando el acceso al campus de Ciutadella de la UPF

Estudiantes de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) han ido a la huelga este martes para reclamar más catalán en las aulas. A primera hora de la mañana han cerrado algunos accesos al campus de la Ciutadella. Ante esta situación, la UPF ha decidido suspender la actividad académica en este campus. 

Los estudiantes afirman que la UPF es la universidad pública catalana con menos horas de docencia en catalán, con un 42,5% de la oferta, y critican la "poca voluntad" para cambiar esta situación. 

Añaden que el fomento de las lenguas extranjeras es el ADN de la UPF y que esto "relega" el catalán a lengua coloquial. Recuerdan que los rectores firmaron un documento en el que se comprometían contra la crisis educativa, que incluía ofrecer el 80% de las clases en catalán el 2025.

La portavoz del movimiento estudiantil de la UPF, Maria Vilardaga, ha reivindicado que los estudiantes no piensan "claudicar" ante la situación que vive el catalán. En el caso de la UPF, ha criticado que el informe sobre la situación lingüística en el centro universitario no se actualiza desde el 2019 y por eso ha exigido que se haga para tener una imagen "cuidadosa" de la realidad.

Por otro lado, el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans (Sepc), ha afirmado en su cuenta oficial de Twitter que “empezamos la lucha con la fuerza y convicción de que solo mediante la lucha conseguiremos aquello que nos a sido tomado”.

En cuanto al documento "Compromís", firmado el año pasado por los rectores, Vilardaga ha pedido también un informe sobre cómo piensa la universidad llegar al 80% establecido en aquel documento. Ha añadido que también se pedirán mecanismos de fiscalización para que los alumnos puedan denunciar las vulneraciones de sus derechos lingüísticos.

Los estudiantes movilizados han pasado la noche en el campus y a primera hora de la mañana han cerrado los principales accesos. Han desplegado también una pancarta donde se puede leer "Universidad ocupada". 

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