OPINIÓN

Puertas giratorias

Un avión ruso repuesta en vuelo, sobre el Kremlin, duranta un ensayo del desfile de la victoria en Moscú (Rusia).
Un avión ruso repuesta en vuelo, sobre el Kremlin, duranta un ensayo del desfile de la victoria en Moscú (Rusia).
YURI KOCHETKOV / EFE
Un avión ruso repuesta en vuelo, sobre el Kremlin, duranta un ensayo del desfile de la victoria en Moscú (Rusia).

A veces, cuando hablamos de puertas giratorias en política, se puede pensar que es una práctica “ilegal” que solo se da en España. Nos equivocamos. En la mayoría de casos es un virus y los virus no tienen fronteras, como el dinero. Pasa en todo el mundo.

Es cierto que en algunos países no se puede pasar de un ministerio a un consejo de administración de la noche al día. En España, por ejemplo, hay la Ley 5/2006 de regulación de los conflictos de intereses de los miembros del Gobierno y de los Altos Cargos de la Administración General del Estado. 

Según esta ley, los que abandonen la administración pública tienen un periodo de dos años en los que existen una serie de limitaciones antes de ejercer responsabilidades en la empresa privada. Les cuento todo esto por el acuerdo de embargo parcial de crudo de Rusia por parte de la Unión Europea. Y también porque todos los países de la Unión se verían muy afectados si se corta del todo la importación de gas y petróleo ruso.

Es obvio que cuando el sátrapa del Kremlin decidió invadir Ucrania sabía que somos dependientes de los productos energéticos rusos. Alemania, por ejemplo, lo es casi totalmente

Los cálculos para España son que su PIB caería hasta 1,4 puntos. Pero es que el de Alemania podría caer hasta el 3,4%, el de Italia, hasta el el 3,9% y el de Francia, por ejemplo, hasta el 2%.

Ya todos vemos lo que está pasando con la inflación, ¿verdad? Pues aún sería peor. Es obvio que cuando el sátrapa del Kremlin decidió invadir Ucrania sabía que somos dependientes de los productos energéticos rusos. Alemania, por ejemplo, lo es casi totalmente. 

¿Por qué?, ¿por qué los eficientes alemanes abandonaron la energía nuclear y se pusieron en manos del Kremlin? Y ahí es donde aparece el excanciller Gerhard Schröder, el “lobista” de Putin en Europa. 

¿Puertas giratorias? Dos semanas después de pasarle el testigo a Angela Merkel, entró en el Nord Stream AG, la gestora del gasoducto que el mismo aprobó cuando era canciller, como también aprobó el fin de la energía nuclear. Felicidades

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