Uno de los electrodomésticos estrella del verano es el aire acondicionado. Con el aumento de la temperatura y la llegada del calor, no hay nada mejor como llegar a casa y encender el aire. Sin embargo, es uno de los aparatos que más energía consume, y que más se nota en la factura mensual de la electricidad.

Como destaca la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el consumo de energía de estos aparatos puede variar mucho según el modelo."En general, los modelos con bomba de calor son más eficientes", pero es necesario conocer cuáles son los factores que influyen en el consumo y cómo calcularlo. 

La potencia, principal factor a tener en cuenta

En primer lugar, el consumo de un aparato eléctrico se calcula "en función de su potencia", indica la OCU. En el caso del aire acondicionado, hay que tener en cuenta su potencia eléctrica para que funcione y su potencia térmica, esto es, su capacidad para enfriar o calentar un espacio.

Por un lado, la potencia eléctrica de entrada es "la cantidad de electricidad necesaria para tener el aparato funcionando una hora de manera continuada". Aparece reflejada en vatios (W) y los aparatos domésticos suelen tener una potencia de 500 W cuando funcionan al mínimo y de 1.500 W si están al máximo.

"Como las facturas de electricidad expresan el consumo en kilovatios por hora (kWh), tendrás que dividir la potencia eléctrica entre 1.000. Así, el consumo del aire acondicionado durante una hora oscilará entre un mínimo de 0,5 kWh y un máximo de 1,5 kWh", explica la organización.

Por su parte, la potencia térmica aparece en kilovatios (kW), aunque también puede aparecer en BTU/h o unidades térmicas británicas por hora. "Para convertirlas a kW, hay que multiplicar por 0,293 y luego dividir por 1.000", detalla.

Calcular el consumo en euros

Para hacer el cálculo aproximado del consumo de energía, prueba a dividir entre dos la suma de las potencias mínima y máxima. De esta manera comprobarás cuánto consume de media el aire por cada hora de funcionamiento. 

¿Y el precio? El coste de la electricidad es variable, pero teniendo en cuenta los altos precios obtenidos en los últimos tiempos, "podemos asumir que cada kWh cuesta 0,30 euros", señala la OCU. Por tanto, el coste durante un mes sería de aproximadamente 36 euros si se mantiene encendido una media de cuatro horas al día. En cualquier caso, aclara la OCU, son estimaciones, ya que influyen múltiples variables.