La reina Isabel II, de 96 años, salió este jueves al balcón del palacio de Buckingham, en Londres, para el saludo oficial al término del desfile militar Trooping the Colour, que marca el comienzo de los festejos por sus 70 años de reinado.
Debido a sus problemas de movilidad, la soberana no hizo el saludo a los regimientos británicos durante el Trooping the Colour, en el patio de armas de Horse Parade, la sede de la guardia de caballería, pero mantuvo el tradicional saludo en el palacio, que hoy despliega un enorme estandarte real.
La reina, con un vestido azul celeste, pamela a juego y bastón en mano, salió al balcón junto a su primo el duque de Kent para saludar a los regimientos que desfilaron frente al balcón.
Nada más aparecer en el balcón, se pudieron escuchar los gritos de miles de personas que ocuparon la gran avenida The Mall, que une el palacio con Whitehall, la zona gubernamental del país.
Han sido pocas las ocasiones en que la reina Isabel II ha sido vista en público en el último año debido a sus problemas para andar, que hace con la ayuda de un bastón.
A este importante desfile, que destaca por el color de la guardia real -con sus trajes rojos y los altos sombreros revestidos con piel de oso-, asistieron otros miembros de la familia real, entre ellos los duques de Sussex, así como invitados especiales.
El príncipe Enrique y Meghan Markle, que se apartaron de la Casa Real en 2020, siguieron el desfile desde un balcón de Horse Parade. Después no estuvieron en el balcón donde la reina saludó a la multitud congregada ante la residencia oficial de la familia real.
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