Un tercio de los catalanes viven en exclusión social, alerta Càritas

  • En la Diócesis de Barcelona hay 885.000 personas en esta situación, 300.000 más. 
  • Los más necesitados destinan el 44% de sus ingresos a vivienda, frente al 35% del resto. 
  • El 43% de las familias atendidas tienen hijos pequeños y adolescentes, 8 puntos más.
Espacio con comida y bebida calientes habilitado para personas en riesgo de exclusión social en la iglesia de Santa Anna de Barcelona.
Espacio con comida y bebida calientes habilitado para personas en riesgo de exclusión social en la iglesia de Santa Anna de Barcelona.
MERITXELL BAYARRI
Espacio con comida y bebida calientes habilitado para personas en riesgo de exclusión social en la iglesia de Santa Anna de Barcelona.

Càritas ha puesto este jueves sobre la mesa una cifra preocupante: 885.000 personas viven en situación de exclusión social en la Diócesis de Barcelona (que comprende la capital catalana y parte de los municipios de las comarcas del Barcelonès, el Baix Llobregat y el Maresme). Son 300.000 más que en el año 2018 y una de cada tres a las que atiende Càritas en esta diócesis.

Un tercio de la población catalana (29,1%) padece de exclusión, ha alertado este jueves la entidad religiosa. La cifra supera en seis puntos a la media española, que se sitúa en el 23,4% en los últimos datos disponibles, correspondientes al Informe Foessa y del año 2021, ya en pandemia.

Más dificultades para pagar la vivienda y los suministros

En este difícil contexto postpandémico y agravado por la crisis provocada por la guerra en Ucrania, y por el aumento de la inflación en España hasta cifras no vistas desde hace dos décadas, Càritas ha detectado que las personas con menos recursos económicos son las que, proporcionalmente, se ven obligadas a destinar un mayor porcentaje de sus ingresos a los gastos elementales de vivienda y alimentación.

Los más necesitados desembolsan de media el 66% de sus ganancias a estos dos conceptos: un 44% a la vivienda y un 22% a la cesta de la compra. En cambio, las personas con más posibilidades monetarias gastan un 51% de su sueldo a vivienda (35%) y a la compra de alimentos (16%). Estos datos los ha extraído el organismo religioso del Instituto Nacional de Estadística (INE).

“La Diócesis de Barcelona atendió en 2021 a un total 27.540 personas, lo que supone 12.560 hogares”

Fruto de este aumento tan significativo de la brecha entre ricos y pobres, la Diócesis de Barcelona ha atendido en 2021 a un total 27.540 personas, lo que supone 12.560 hogares. A nivel catalán, las 12 diócesis han dado soporte a un total de 65.287 personas (27.870 domicilios). Càritas ha destinado el 77% de los 22,7 millones de euros de presupuesto a estas tareas de acción social.

Por otro lado, Cáritas Barcelona también ha hecho diferentes acciones para ayudar a las personas que están en riesgo de aislamiento social para reducir la brecha digital. “Hemos dado dispositivos electrónicos adecuados a 220 familias con niños, facilitado formaciones necesarias en autonomía digital y hemos pagado la conexión a 102 personas”, ha confirmado Miriam Feu, responsable de análisis social e incidencia de Càritas Diocesana de Barcelona.

En 2021, Càritas dio soporte a un 43% de familias con hijos pequeños o adolescentes, 8 puntos porcentuales más que en 2020. Las familias monoparentales son el 18% de los auxiliados, 5 puntos más que en 2020. 

Más ayudas para pagar suministros básicos 

Càritas ha avisado este jueves que, de enero a abril de este año, ya se han incrementado en un 8% las personas atendidas en Cataluña respecto a los primeros cuatro meses de 2021. 

Las personas que se dirigen a la entidad para recibir apoyo suponen casos de “mayor complejidad, vulnerabilidad y agotamiento y con necesidades de ayudas económicas urgentes”, ha puesto de manifiesto Feu, que culpa a la pandemia de esta situación por paralizar la economía de muchas familias. 

En este sentido,  Càritas Barcelona también reivindica la necesidad de ejecutar políticas dirigidas a que las personas que se encuentran en una situación administrativa irregular consigan los papeles. Este colectivo se ha visto gravemente afectado tras la pandemia porque tiene aún más difícil acceder al mercado laboral y, por lo tanto, no puede cambiar su situación administrativa. 

“De enero a abril de este año, ya se han incrementado en un 8% las personas atendidas en Cataluña respecto a los primeros cuatro meses de 2020”

La entidad ha aumentado un 22% las ayudas económicas y, fruto del permanente encarecimiento del gasto dedicado la vivienda y al pago de los suministros básicos (con precios de hasta 500 euros por el alquiler de una habitación en Barcelona ciudad) las ayudas de Càritas para pagar la factura del agua, del gas o de la luz ha pasado de 97.618 euros en 2020 a los 120.934 euros en 2021, una subida del 24%. La media de ayudas para vivienda por cada hogar atendido se ha incrementado en un 14%.

Además, dos de cada tres ayudas concedidas han ido destinadas a la vivienda, y de estas, una de cada tres han sido por ‘realquiler’ de pisos y habitaciones. Suman 2,2 millones de euros que han beneficiado a 4.622 personas. Más de 3.000 hogares han podido comprar alimentos básicos gracias a la tarjeta monedero de Càritas Barcelona.

“Dos de cada tres ayudas concedidas han ido destinadas a la vivienda”

Por todo ello, Càritas ha insistido este jueves en el mensaje de que “garantizar el derecho a la vivienda es un elemento clave en la lucha contra la exclusión social”, por lo que han propuesto medidas sociales con carácter urgente a aplicar en Cataluña, como la ampliación del parque de vivienda pública de alquiler social, regular el acceso a pisos de emergencia social, garantizar el derecho a la energía a los colectivos más vulnerables y aprobar una ley para erradicar el sinhogarismo. Lo ha detallado el director de Càritas Diocesana de Barcelona, Salvador Busquets.

El Cardenal Arzobispo de Barcelona, Joan Josep Omella, se ha referido este jueves a los políticos de que “a veces hacen promesas que no llegan” y como el “dinero no llega” son las instituciones sociales las que acaban encargándose de todas estas urgencias sociales. Por eso, ha apelado a que todas estas entidades trabajen “en una misma dirección”. 

Así pues, Omella ha agradecido la tarea de las personas que hacen posible Cáritas al conjunto de la Diócesis de Barcelona, destacando el apoyo de los 9.854 socios y donantes y de las 650 empresas y entidades que han ayudado con sus aportaciones durante el 2021.

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