El Gobierno de Francia propone limitar el aumento de los alquileres de vivienda al 3,5%

El ministro de Economía y Finanzas de Francia, Bruno Le Maire en la cumbre del G7.
El ministro de Economía y Finanzas de Francia, Bruno Le Maire 
Ian Langsdon
El ministro de Economía y Finanzas de Francia, Bruno Le Maire en la cumbre del G7.

El Gobierno de Francia busca "una nueva protección" a sus ciudadanos con una propuesta que pretende limitar el aumento de los alquileres de viviendas hasta un máximo del 3,5 % durante el próximo año.

Esta medida, así como el incremento del 4 % de diferentes prestaciones sociales, forman parte de un proyecto de ley que plantea apoyar el poder adquisitivo de la población y brindar una ayuda para que estas personas puedan sobrellevar el aumento de precios. Se espera que esta iniciativa sea aprobada el próximo 6 de julio.

Durante una entrevista con BFM TV, el ministro de Economía, Bruno Le Maire, ha indicado que la cifra del 3,5 % es "el mejor compromiso para todos", ya que los alquileres podrían haber subido hasta un 6 %, pero por el otro lado "si se congelan, no hay incitación para construir, y hace falta construir" más viviendas.

Le Maire ha instado a los ciudadanos a la "sobriedad" en el consumo de energía ante los elevados precios y para asegurar el suministro, pero también urgió a la "responsabilidad" de las empresas a la hora de marcar sus precios.

"La sobriedad es necesaria, no tiene alternativas", ha insistido el responsable de la economía francesa, quien relacionó la necesidad de garantizar el suministro energético el próximo invierno con los preparativos para reabrir la central térmica alimentada por carbón de Saint-Avold, cerrada en marzo pasado.

El funcionario ha rechazado la petición de algunas formaciones de la oposición de reducir los impuestos sobre los carburantes, ya que eso costaría al erario público entre 20.000 y 22.000 millones de euros al año, y "eso no es posible" porque hemos alcanzando "el nivel de alerta sobre las finanzas públicas".

En su lugar, se prevé mantener medidas temporales de subvención de precios y ayudas fiscales a quienes dependen del automóvil para acudir a su trabajo.

La deuda pública francesa está en 2,9 billones de euros, pero Le Maire ha recalcado que el problema no es su volumen sino sus condiciones de financiación, ya que hasta hace poco tenía intereses del 0 % o incluso negativos, y ahora se ha alcanzado el 2 %. 

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