Más de la mitad de las personas no binarias ha rechazado ir al médico por miedo y el 80% ha sufrido discriminación en su propia familia

Es algo a lo que se comprometió el Ministerio de Igualdad nada más constituirse y que finalmente se ha instrumentalizado por el día de la visibilidad no binaria. El primer gran estudio sobre la realidad de las personas no binarias en España ha sido presentado este jueves para ofrecer un análisis de las demandas, necesidades y problemas a las que se enfrentan. En él, se plasma una fotografía general de la situación de un colectivo que, según los resultados, suele residir en grandes ciudades, tienen menos de 35 años y generalmente se identifican como personas trans. 

Además, según revelan las respuestas de las 2.000 personas encuestadas por el departamento de Irene Montero, son el entorno familiar y los ámbitos educativo, sanitario y laboral, los identificados como más inseguros por las personas no binarias; frente a las amistades, grupos de iguales y el contexto digital, que son los que normalmente constituyen una mayor red de apoyo. 

Aun así, estos últimos suelen ser residuales, según confiesan las personas encuestadas, y en el estudio se urge a dar pasos para incrementar la visibilidad del colectivo, mejorar en la recopilación de datos y erradicar las discriminaciones que sufren en su día a día.

Fuera de la ley trans, por ahora

"Este estudio es un ejercicio de reflexión colectiva que persigue el fin de que sus contenidos se puedan traducir en la creación de conocimiento útil que apoye la promoción de políticas públicas concretas y la producción de cambios sociales", ha destacado la directora general de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI, Boti García, durante el acto de presentación. "Que no se nos olvide recordar a nuestros gobernantes que nunca más deben hacerse políticas públicas sin contar con las personas hacia quienes van dirigidas", ha sentenciado. 

Y es que, pese al empeño de Igualdad, la ley trans -recién salida del Ejecutivo para emprender su tramitación parlamentaria- no incluye, por ahora, el reconocimiento de las personas no binarias. Es, según han expresado miembros del ministerio en varias ocasiones, y tal y como resaltó Boti en una entrevista para 20minutos, una meta que tratarán de alcanzar durante toda la negociación con los grupos en el Congreso de los Diputados. 

La familia, el espacio menos seguro

La realidad de las personas no binarias sigue siendo algo tan desconocido como incomprendido por una parte importante de la sociedad. Lo cierto es que no fue hasta este siglo, en torno a la segunda década de los 2000, cuando empezó a hacerse visible el fenómeno social de personas que se identificaban fuera de la identidad masculina o femenina. Es decir, al margen del binarismo de género. Pero los profesionales del ámbito de la atención y acompañamiento a la diversidad sexual y de género ya apuntan a un aumento significativo de la tendencia en los últimos ocho años.

Pero de momento ese aumento de la tendencia no ha ido de la mano del aumento del reconocimiento de la sociedad, ni de las instituciones. Preguntadas por los ámbitos en los que se sienten más libres de expresarse no binarias, las personas encuestadas señalan el ámbito de la familia como el menos seguro (el 71% así lo señala), seguido de cerca por el laboral (65%), el sanitario (43%) y el educativo (40%). En el lado contrario, entre los entornos "seguros", se perciben el de las amistades (86%), el grupo de iguales (52%) y el entorno digital (44%). 

"La invisibilización, el desconocimiento, las respuestas de odio y la discrecionalidad crean condiciones concretas de vulnerabilidad en el acceso a oportunidades sociales de las personas no binarias", indica el texto. Un ejemplo de ello es que más de la mitad (el 55%) de las personas encuestadas ha rechazado o pospuesto alguna vez acudir a cualquier servicio sanitario por miedo a ser juzgados. El 65% ha sufrido discriminación en los espacios públicos y un 80% en relaciones o actividades familiares.  

La mayoría tiene menos de 35 años

Este informe proporciona también una aproximación de las características sociodemográficas de un colectivo que, tal y como han expresado los ponentes este jueves, sigue estando visibilizado incluso dentro del propio colectivo LGTBI. Son jóvenes, viven en ciudades, y en su mayoría han nacido mujeres. 

Según los resultados, el 95% de las personas encuestadas tiene menos de 35 años, y un 75% declara que tenía entre 15 y 25 años cuando encontró "la primera etiqueta" relativa al género no binario. Además, cabe destacar que la mayoría (el 64%) se considera trans, mientras que el 36% no lo hace y únicamente un 3% se identifica como intersex. Respecto a su orientación sexual, el 48% de las personas preguntadas se identifica como bisexual, un 16% homosexual y un 10% como asexual. Respecto a su orientación sexual, el 48% de las personas preguntadas se identifica como bisexual, un 16% homosexual y un 10% asexual. 

Asimismo, el 75% son personas asignadas mujeres al nacer, y casi la mitad (el 45%) reside en ciudades de más de 200.000 habitantes, frente al 4% que vive en municipios de menos de 2.000 habitantes. En esa línea, son la Comunidad de Madrid (21%), Cataluña (21%) las ciudades representadas; y La Rioja (1%) y Cantabria (1%) las que menos.