El avance del cambio climático es el responsable de la desaparición de entornos favorables para algunas especies como la del oso polar. Como consecuencia, estos animales se ven obligados a buscar comida en lugares inapropiados para ellos como son los vertederos.

La protagonista de esta historia es una osa polar asentada en Dikson, un asentamiento ártico al norte de Rusia. El animal resultó herido tras quedar su lengua atrapada en una lata de leche condensada, lo que le produjo cortes y heridas profundas.

Así, la osa se acercó a la población donde los vecinos alertaron al zoológico de Moscú para socorrer al animal. Un equipo de veterinarios anestesió a la osa para retirar la lata y curar las profundas heridas que mostraba en la zona del hocico. Además, el animal presentaba una extrema delgadez y deshidratación.

Tras la intervención de los especialistas, la osa se encuentra en recuperación y observación. Desde el zoológico han dejado peces cerca del animal para que pueda alimentarse ya que las heridas no le permitieron ingerir comida.

Cada vez es más habitual encontrar este tipo de animales en zonas de basura en busca de comida debido a las pésimas condiciones que presenta su hábitat natural, tal y como advierte un equipo de investigadores de Canadá y Estados Unidos.