Internacional

Dos cadetes denuncian a Maersk alegando abuso y acoso sexual por parte de otros tripulantes en el mar

Cadete estadounidense denuncia abuso sexual en un barco de Maersk
Sanford Heisler Sharp

Hope Hicks, una joven cadete estadounidense, ha decidido denunciar al gigante del transporte marítimo internacional Maersk, alegando que la compaña no la protegió de ser abusada sexualmente. 

En una demanda presentada el pasado mes de junio en la Corte Suprema del condado de Nassau (Nueva York), Hicks alegó que Maersk Line, la puso en peligro mientras se encontraba abordo de un barco de la compañía como parte de su formación como cadete. 

En un principio, Hicks denunció su caso en una publicación anónima en el sitio web de Maritime Legal Aid & Advocacy, donde señaló que sufrió abuso sexual por un supervisor en el barco Alliance Fairfax en 2019 cuando tenía 19 años. Sin embargo, ahora decidió hacer público su  nombre para animar a aquellos que hayan vivido situaciones similares a tomar medidas para defenderse.

En su demanda, la cadete recalcó que la empresa no tenía un sistema en Alliance Fairfax para rastrear o restringir el uso de llaves maestras, al cual tenían acceso su presunto atacante y otros miembros de la tripulación, por lo que estas personas tenían acceso "sin restricciones" a su habitación. 

Además, señaló que en el barco no había wifi para comunicarse con el exterior y que temía pedirle al capitán que usara un teléfono satelital, situación que la dejó sin la posibilidad de pedir ayuda. 

La historia de Hope Hicks 

En la publicación mencionada, Hicks se identifica como una estudiante de último año en la Academia de la Marina Mercante de EE.UU. (USMMA, por sus siglas en inglés) en Kings Point, Nueva York, que capacita a los estudiantes para convertirlos en funcionarios comisionados en las fuerzas armadas y oficiales de la Marina Mercante para que trabajen en barcos que transportan carga y pasajeros en todo el mundo.

Relató que era la única mujer en un barco de Maersk durante su Año en el Mar, un programa obligatorio cuando los estudiantes trabajan en embarcaciones comerciales.

Hicks indicó que, después de salir de un puerto en el Medio Oriente, los ingenieros en el barco la obligaron a ella y a su compañero cadete a consumir gran cantidad de licor en un noche y que, tras desmayarse, despertó desnuda en su cama. "Había sangre en mis sábanas y supe de inmediato que había sido violada", escribió. 

"Yo era virgen y me había estado guardando, y tan pronto como me desperté pude sentir que estaba muy adolorida y sabía exactamente lo que había sucedido", puntualizó. 

Había sangre en mis sábanas y supe de inmediato que había sido violada

La joven, que ahora tiene 22 años, afirmó que su supervisor en el barco, un ingeniero senior de unos 60 años y el segundo al mando de su departamento, la había estado acosando sexualmente durante las semanas previas al presunto abuso. 

Según contó, el hombre que la había violado la llamó horas después de lo sucedido y le pidió que fuera a su habitación diciéndole que tenían que hablar. Una vez allí, ella lo acusó de abuso sexual, algo que este hombre negó afirmado que solo le había ayudado a regresar a su habitación.  

"Lo que sea que creyeras que pasó, no se lo dirías al capitán, ¿verdad?", fueron las palabras que, según Hicks, el hombre le dijo al poner la mano en su muslo. 

Cuando ella se levantó para irse, el presunto violador le dijo que nadie le creería. "De vuelta en mi habitación, decidí que lo único que podía hacer era resistir", se lee en la publicación.

"Nadie me iba a creer, y aguantarlo era la única opción que sentía que tenía. Estaba atrapada", afirmó y agregó que durante los siguientes 50 días tuvo que seguir trabajando para el hombre que la había abusado.

Otra víctima de abuso

Los abogados de Hicks también presentaron una segunda demanda en nombre de una mujer identificada como "Midshipman-Y", quien dijo haber enfrentado acoso sexual y tocamientos no deseados como cadete a bordo del mismo buque en 2021, cuando ella tenía 18 años. 

Según la denuncia, "Midshipman-Y" fue acosada por un miembro de la tripulación que era conocido como una persona violenta por otros oficiales y personal de tripulación de Maersk. 

El recurso judicial resalta que las personas abordo del barco supuestamente estaban al tanto del acoso y no intervinieron ni denunciaron la mala conducta. 

"Se encerraba en el baño y dormía en el piso por la noche mientras sostenía una navaja para protegerse", escribieron sus abogados en la demanda ante la Corte Suprema del condado de Nassau. 

El tribunal instruyó a la defensa de la mujer a volver a presentar la demanda a través de un proceso especial bajo el nombre real de la víctima. 

¿Qué dice Maersk?

La compañía Maersk Line Limited manifestó en un comunicado que cualquier acusación de este tipo es tomada en serio. "Tenemos tolerancia cero para el abuso, el acoso o cualquier forma de discriminación en nuestros barcos o en nuestra empresa", aseguró la empresa. 

El gigante de transporte marítimo dijo que "no toleraremos ningún incumplimiento de nuestras políticas con respecto al trato justo de todo el personal". Sin embargo, se negó a hablar sobre la indagación que viene adelantando sobre estas denuncias. 

El pasado mes de febrero fueron despedidos cinco tributantes, tres por violaciones de la política de alcohol de la compañía y dos, incluido el presunto atacante de Hicks, por no cooperar con la investigación. 

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