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El Gobierno supera el primer examen del curso político entre advertencias de sus socios y la repulsa de la oposición

La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en el Congreso de los Diputados.
EFE

Primer día de Congreso tras el parón estival, primer examen del nuevo curso político y primer aprobado del Gobierno. Arranque casi inmejorable para los de Pedro Sánchez, que, además de convalidar los decretos sobre eficiencia energética, incendios forestales y cotización de autónomos, han logrado la aprobación definitiva de las leyes de libertad sexual, de Ciencia y la reforma de la Ley Concursal. La única nota discordante: las advertencias que dejaron entrever sus socios habituales tras otra agónica negociación y el rechazo total de la oposición, comportamientos ambos que -de repetirse- podrían complicar próximas votaciones.

Este jueves 25 de agosto el Congreso acogía un pleno extraordinario de gran actividad. Uno de los platos fuertes era el debate sobre la estrategia para reducir el consumo de energía en plena crisis por la invasión de Rusia a Ucrania. El decreto, en vigor desde el 10 de agosto, además de incluir las obligaciones de limitar la temperatura en interiores a un mínimo de 27 grados en verano y a un máximo de 19 en invierno o el apagado de escaparates y edificios públicos a partir de las 22.00 horas, albergaba disposiciones de carácter social, léanse becas a estudiantes, ayudas al transporte o el fin de las obligaciones vinculadas a la COVID-19 en los aeropuertos. 

Y fue precisamente la heterogeneidad de los asuntos que albergaba lo que aglutinó la mayor parte de las críticas: "Decreto ómnibus", "batiburrillo de medidas", "mezclar churras con merinas"... Los dardos se sucedieron desde frentes de todo signo político. Concretamente, Coalición Canaria, PP y Ciudadanos sugirieron que, de haber llegado al Congreso por separado, algunas medidas habrían contado con su respaldo.

El bloque de la oposición también se mostró muy en desacuerdo con las formas que manejó el Gobierno para gestionar su plan de ahorro energético: sin negociación, sin debate y con el pretexto de la urgencia con la que la Unión Europea había impuesto la reducción del 7% en el consumo de gas. "Se basa en improvisación e imposición", acotaba la líder popular, Cuca Gamarra, al respecto. También, ERC o EH Bildu, se sumaron a los reproches por la falta de diálogo. 

Dicho lo cual, el decreto fue convalidado con holgura (187 votos a favor, 161 en contra y una abstención), sí. Pero, para recabar los apoyos necesarios, fue indispensable que el Gobierno aceptara tramitarlo como proyecto de ley: vía que permitirá a las fuerzas parlamentarias introducir, más adelante, medidas adicionales en el texto.

Misma suerte corrió la reforma de las cuotas de los autónomos. Con 260 votos a favor, fue convalidado el decreto que entrará en vigor el próximo 1 de enero de 2023 y por el que se establece un nuevo sistema de cotización para los trabajadores por cuenta propia. Eso sí, de nuevo prácticamente la totalidad de los grupos pidieron que se tramitara como proyecto de ley,  abriendo la puerta a modificaciones. 

El 3 en 1 vino con el decreto concerniente a los incendios. El Congreso convalidó las medidas que aprobó el Gobierno el pasado 1 de agosto para mejorar la prevención y la capacidad de respuesta de las comunidades autónomas frente a los incendios forestales. Esto obliga a todas las regiones a presentar antes del 31 de octubre un plan de prevención y extinción de fuegos que sea válido para todo su territorio y que se aplique de manera interrumpida durante todo el año (porque como sostienen los expertos y brigadistas, los incendios se apagan en invierno mediante  medidas de prevención).

Leyes de libertad sexual, Ciencia y Concursal

También este jueves se aprobaron de forma definitiva tres leyes que, habiéndose topado con enmiendas durante su tramitación en el Senado, volvían a someterse a votación en el Congreso, cambios aparte. Con resultado que se esperaba: dejar todas ellas tal y como llegaron a la Cámara Alta.  

El caso más paradigmático es de la ley de libertad sexual, comúnmente conocida como ley del solo sí es sí, que -tras treinta meses de tramitación y duras negociaciones- ha salido adelante con una solida mayoría de 205 votos a favor. El proyecto estrella de la ministra de Igualdad, Irene Montero, solo ha contado con el 'no' de PP y Vox. 

"Por fin nuestro país reconoce que el consentimiento por ley es lo que tiene que estar en el centro de todas nuestras relaciones sexuales. Ninguna mujer va a tener que demostrar que hubo violencia o intimidación en una agresión para que sea considerado como tal", celebró la titular de Igualdad.

La ley de Ciencia, por su parte, también ha salido adelante. El texto, que en puridad es una reforma de la norma actualmente vigente (2011), persigue tres objetivos principales. Blindar la financiación suficiente a las labores de Investigación y Desarrollo (I+D), el 1,25% del PIB de aquí al 2030. Disminuir la burocracia y simplificar la carga administrativa en la petición de ayudas. Y brindar estabilidad laboral a científicos y trabajadores. En la votación definitiva, la mayoría de la cámara ha declinado la enmienda que introdujo en su día el PP para que contratos temporales o definitivos se otorgaran en función de la financiación del proyecto, sea estatal o europea.

A juicio de la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, esto supone "un paso adelante que da este país para ser un buen país para la ciencia".

Por último, el Congreso ha dado luz verde a la reforma de la Ley Concursal, que, traspasando la nueva normativa comunitaria en materia mercantil, también introducirá variaciones para agilizar los trámites y, promoverá, entre otros asuntos, la reestructuración temprana de empresas viables y la posibilidad de exonerar de obligaciones a los deudores de buena fe.  

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