Nuevas imágenes sugieren que el detenido por intentar matar a Cristina Fernández planeó el ataque con ayuda de su novia
- La pareja del arrestado habría estado junto a la casa de la vicepresidenta los días previos para recabar información.
- La novia del atacante de Cristina Fernández de Kirchner niega su participación en el intento de magnicidio.
Nuevas imágenes difundidas este miércoles sugieren a los investigadores que el atentado contra la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, fue planificado con varios días de antelación, según informaron medios locales.
Brenda Uliarte, novia del principal acusado por el intento de magnicidio, quien permanece bajo arresto policial, tenía entre sus ocupaciones la venta callejera de algodón de azúcar (conocidos en Argentina como "copos de nieve"), tal y como ella misma admitió en declaraciones al canal de noticias Crónica TV hace menos de un mes.
De acuerdo con imágenes difundidas por medios de comunicación locales, la primera vez que se observa un carrito con algodón de azúcar cerca de la vivienda de Fernández fue el 23 de agosto, en el inicio de las manifestaciones de apoyo a la exmandataria (2007-2015) tras la petición de condena a doce años de prisión en su contra.
Un carrito similar volvió a observarse cuatro días después, en el marco de las protestas por la instalación de un vallado perimetral en torno al domicilio de Cristina Fernández.
Según medios locales, los investigadores trabajan en la hipótesis de que Uliarte estuvo haciendo "inteligencia" los días previos al atentado, para facilitar información a su pareja, Fernando Sabag Montiel, el hombre brasileño de 35 años que intentó disparar a la vicepresidenta el 1 de septiembre.
Esta hipótesis estaría apoyada por otras imágenes del mismo día del ataque, que corroboran la presencia de ambos en el lugar de los hechos, algo que en un primer momento negó Uliarte.
Uliarte fue trasladada este martes a los tribunales federales de Comodoro Py (provincia de Buenos Aires) para prestar declaración ante la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo, en medio de una investigación que transcurre con gran hermetismo tras la imposición del secreto de sumario.
En la noche del jueves pasado, Montiel intentó disparar en el rostro de Cristina Fernández, pero el disparo no se produjo y fue reducido por los militantes allí congregados.