Prohibir de forma cautelar la celebración del Toro de la Vega en la localidad de Tordesillas (Valladolid). Ese es el objetivo del escrito que han presentado este jueves ante la Fiscalía la secretaria de Estado de Derechos Sociales y Agenda 2030, Lilith Verstrynge, y el director general de Derechos de los Animales, Sergio García Torres, que solicitan que se impida dicho evento previsto para el próximo martes, 13 de septiembre. 

Aunque desde hace años está prohibido dar muerte al toro, el Ejecutivo considera en su escrito que la celebración de este festejo "podría derivar en un delito de maltrato animal".

"Es un festejo que no debería realizarse en pleno siglo XXI. La realidad que son lanzas de más de tres metros con heridas de hasta 12 centímetros que pueden provocar heridas de hasta 12 centímetros, perforar órganos vitales y generar hasta la muerte", ha resaltado Verstrynge en declaraciones a los medios de comunicación frente a la sede de la Fiscalía de Sala de Medio Ambiente.

Y es que desde el ministerio se considera que el Toro de la Vega se sustenta en el "sufrimiento de un animal indefenso", al que se pincha repetidamente con una lanza de casi tres metros y que le provoca graves heridas, que incluso pueden acarrear la muerte del animal. 

Pero además, según denuncian, la convocatoria del evento, que no se celebraba desde antes de la pandemia, incumple el propio reglamento de espectáculos taurinos populares de Castilla y León y por eso lo "intentan trampear", autorizándolo sin matar al animal, para que se vuelva a celebrar en Tordesillas el Toro de la Vega. 

El departamento que dirige Ione Belarra explica que el artículo 19 de dicho reglamento relativo a la protección de las reses de lidia se establece que en los espectáculos populares queda "prohibido herir, pinchar, golpear, sujetar o tratar de cualquier otro modo cruel a las reses". Y en su escrito ante la Fiscalía, el ministerio aporta opiniones de veterinarios que sostienen que heridas de hasta 12 centímetros de profundidad que pueden provocarse al toro en este evento de Tordesillas así como la ubicación de las lanzadas puedan "afectar a la zona torácica del animal, traspasar la pared muscular que cubre su tórax y provocar lo que se conoce como neumotórax".

"Este tipo de patología, de reconocida gravedad, se ha descrito por el uso de puyas y de banderillas en los festejos en plaza y se ha identificado en los estudios post mortem de toros y novillos lidiados", alega el escrito.

Verstrynge ha asegurado que su departamento se ha puesto en contacto con el Gobierno de Castilla y León, pero que en el momento de presentar el escrito ante la Fiscalía no habían recibido respuesta.

Pero además, Derechos Sociales estudia también vías para retirar a la tauromaquia el reconocimiento de patrimonio cultural, aprobado por el PP en el año 2013. "Es un momento perfecto para decir que la tauromaquia no puede ser patrimonio cultural. Nuestro deber es proteger a los animales y por eso creemos que se deben paralizar estas fiestas y no se puede seguir maltratando de esta manera tan sádica a los toros", ha explicado la secretaria de Estado.