Los tres mossos imputados por reventar el testículo a un joven con una pelota de foam afirman que no recuerdan quién disparó

  • Los agentes han declarado este lunes ante el titular del juzgado de instrucción número 12 de Barcelona.
Agentes de Mossos d'Esquadra preparados para disparar proyectiles de foam en el marco de los disturbios por el encarcelamiento de Pablo Hasel en Barcelona.
Agentes de Mossos d'Esquadra preparados para disparar proyectiles de foam en una imagen de archivo.
Hugo Fernández
Agentes de Mossos d'Esquadra preparados para disparar proyectiles de foam en el marco de los disturbios por el encarcelamiento de Pablo Hasel en Barcelona.

Tres escopeteros de los Mossos d'Esquadra investigados por reventar el testículo a un manifestante con una pelota de foam en 2018 han admitido que dispararon proyectiles, debido a la violencia de los concentrados, pero han aducido que no recuerdan quien efectuó el tiro que causó las lesiones.

Según han informado fuentes jurídicas, los tres agentes han declarado este lunes como imputados ante el titular del juzgado de instrucción número 12 de Barcelona, que investiga la querella presentada por un joven manifestante que perdió un testículo por el disparo de una pelota de foam, en una protesta contra el Consejo de Ministros que se celebró en 2018 en Barcelona.

Hasta ahora, en la causa ha declarado como testigo el manifestante herido y los Mossos d'Esquadra han aportado grabaciones de la intervención policial en la que el joven resultó herido, además de identificar a cinco escopeteros que actuaron en la zona, aunque no han podido concretar cuál de ellos fue el autor de los disparos.

Las declaraciones de este lunes tampoco han contribuido a aclarar los hechos, dado que los tres agentes imputados se han acogido a su derecho a no responder a las preguntas de la acusación particular ejercida por la víctima y solo han contestado al juez y a su propia defensa.

En su declaración, los agentes han asegurado que no recuerdan la secuencia concreta en la que cayó herido el manifestante, pero han insistido en que el disparo de foam en esa protesta estaba justificado, porque los manifestantes habían empezado a hacer lanzamientos en dirección a la línea policial.

En declaraciones a los medios, la abogada Sonia Olivella, de la asociación pro derechos humanos Iridia y que representa al manifestante herido, ha sostenido que, a la luz de los vídeos sobre la intervención policial que constan en la causa, el proyectil se disparó "de forma contraria a los protocolos previstos".

En su opinión, cuando el manifestante recibió el impacto del "foam" en el testículo, ni él ni ningún otro manifestante del entorno estaban causando alboroto.

"Se dispara a un chico de 19 años, sin que estuviera llevando a cabo ninguna actitud agresiva ni violenta, simplemente por estar manifestándose", ha insistido.

Olivella ha pedido que la comisión del Parlament que está revisando el modelo policial se replantee el uso de los proyectiles de foam -nueve años después de que prohibiera las pelotas de goma-, porque son "altamente lesivos, se utilizan cuando no se tienen que utilizar y, además, no está garantizada su trazabilidad".

La querella presentada por el manifestante sostiene que fue un agente de un cordón policial de Mossos d'Esquadra situado en calle Fusteria de Barcelona el que disparó el proyectil de foam que impactó en su testículo derecho, que tuvo que ser amputado por las lesiones que presentaba.

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