La CEOE avisa que la sanidad privada supone 1,2 de millones empleos y el 9,5% del PIB ante el intento del Gobierno de limitarla al máximo

La CEOE y el sector empresarial de la sanidad han dado este miércoles la voz de alarma contra la Ley de Equidad sanitaria que limitará los conciertos con la sanidad pública a los estrictamente imprescindibles porque considera que no resuelve los problemas que tiene el sector y que, por el contrario, perjudicará a una actividad privada que emplea a 1,2 millones de personas, que genera el 9,5% del PIB y que, con farmacia y dependencia, factura 109.000 millones de euros.

La Comisión de Sanidad y Asuntos Sociales de la CEOE ha presentado el informe Cifras, retos y oportunidades del sector sanitario tras el Covid, que subraya como uno de sus "problemas" la nueva ley que buscará limitar al máximos los conciertos sanitarios y eliminar los copagos. En concreto, una vez que termine el trámite parlamentario, la gestión indirecta 

-privada- pasará de ser sustitutoria de la directa -pública- como ahora a únicamente complementaria cuando no haya otra opción. Aunque la ley no elimina las privatizaciones ni revertirá las que ya existen, como exigió sin éxito hasta el último momento Unidas Podemos al PSOE, fijará criterios con las comunidades para determinar en qué casos la privatización de un servicio sanitario es imprescindible para llevarlo a cabo.

Por el contrario, la CEOE apuesta por "potenciar la colaboración público-privada" o "mejorar las condiciones de los conciertos" con las administraciones públicas y hace una serie de reclamaciones en los distintos niveles del sector. Para que haya más profesionales, aumentar las plazas MIR y nuevas facultades de Medicina. En fiscalidad, reducir y homogeneizar el IVA de los productos sanitarios o el acceso a medicamentos innovadores.

"Preocupación" por la nueva ley

La patronal no oculta su "preocupación por la repercusión" que tendrá esta ley y considera que "no resuelve los problemas estructurales" de la Sanidad, pero sí puede afectar a "tejido empresarial sanitario", un sector que genera cientos de miles de millones y más de un millón de puestos de trabajo. 

Para el presidente de la comisión y de la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE), Carlos Rus, "es necesario trabajar por un fortalecimiento que favorezca la optimización de la gestión sanitaria, con todos y cada uno de los medios de los que disponemos, sin exclusiones", ha dicho en defensa del sector privado. "Es primordial la toma de decisiones en base a resultados en salud y satisfacción de los pacientes y del colectivo de profesionales encargado de atenderles, no en premisas ideológicas", ha afirmado.

En este sentido, la CEOE cree que la ley de Equidad no da respuesta a problemas del sector sanitario para los que considera que el Gobierno debería contar también con la sanidad privada. Los déficits que apunta son "la escasez de profesionales, la ausencia de interoperabilidad eficiente" de las historias clínicas, "la saturación del sistema" debido a la "demanda oculta" que ha generado la Covid o las "diferencias territoriales" entre los servicios básicos y adicionales que incluyen las carteras sanitarias de las distintas comunidades.

Pactos de Estado

Además de Sanidad, este organismo de la CEOE agrupa al sector empresarial de farmacia y de dependencia. Este miércoles, sus respectivos vicepresidentes, Luis de Palacio por farmacia y Natalia Roldán por dependencia, han reclamado al Gobierno sendos pactos de Estado. 

En el primer caso, para que en la ley que no permitirá hacer más copagos  el acceso a los medicamentos no se limite solo al precio financiado, sino que tenga también en cuenta su valor estratégico, la sostenibilidad de la cadena de suministro y la facilidad de acceso.

El pacto de Estado por la Dependencia que reclama la CEOE debería permitir servicios de calidad y la libre elección de centros por parte de los mayores suficientemente bien financiados por el Estado y las comunidades.

De acuerdo a las cifras del informe de la CEOE, la sanidad privada facturó 78.227 millones, el sector de farmacia, 26.586, y el de dependencia, 7.000. En cuanto al empleo, la sanidad privada empela a 770.561 personas, la dependencia, a 314.500, y farmacia, a 187.867.

Dentro del empleo sanitario, la mayor parte se concentra en la asistencia sanitaria, un 40%, es decir, 312.000 puestos de trabajo, seguido muy de cerca por los "autónomos" en este ámbito, que constituyen el 38%, 297.500 personas.

El informe de la CEOE destaca que la atención sanitaria se divide casi a la mitad, un 40-60%, entre la que prestan las empresas privadas y el sector público. El peso de este último en Sanidad solo es superado por los servicios de prevención -porque se ocupa del 86,35% frente al 13,65% el privado- y de tecnología sanitaria -un 71% pública y un 29% privada-.

Por el contrario, el peso del sector privado es muy superior al público en servicios funerarios (95% frente al 5%), sanidad ambiental (93% frente a 6%), veterinaria (87% frente a 13%) y seguros (86% frente a 14%).

91.000 personas trabajan en farmacia minorista, 180.000 en residencias y 130.000 personas más en ayuda a domicilio a personas dependientes, según otras cifras que ha ofrecido la CEOE sobre las empresas sanitarias.