Iraníes, estadounidenses, rusos... así son todos los drones que están combatiendo en los cielos de Ucrania

Los drones son una poderosa arma de guerra del siglo XXI y en Ucrania están siendo utilizados para bombardear instalaciones militares, infraestructuras y, en el peor de los casos, para masacrar a la población civil.

Rusia está utilizando a gran escala los drones kamikaze Shahed 136, de fabricación iraní, pero no son los únicos que están combatiendo sobre el terreno. También lo han hecho aparatos no tripulados fabricados en Estados Unidos, China o Turquía. Estos son algunos ejemplos:

SHAHED 136. Son los drones más conocidos por los ataques masivos que ha lanzado el Kremlin contra infraestructuras civiles en las principales ciudades ucranianas. Fabricados en Irán, pero renombrados por el ejército ruso como Geran-2, pueden lanzar ataques a distancias de hasta 2.500 kilómetros. Miden 3,5 metros de largo y 2,5 metros de ancho. Su peso ronda los 200 kilos y son difíciles de detectar por los radares.

R18. Es un dron de combate ucraniano desarrollado por la corporación Aerorozvidka. Está diseñado para destruir vehículos blindados y lanzamisiles. Es un octocóptero de ocho hélices y ocho motores, con capacidad de despegue y aterrizaje vertical. Ha sido utilizado para destruir equipamiento militar ruso por valor de 130 millones dólares.

BAYRAKTAR TB2. De fabricación turca, los TB2 han sido utilizados por el ejército ucraniano en su lucha frente a la invasión rusa. Del tamaño de un avión pequeño, cuentan con una serie de cámaras de alta resolución para identificar objetivos. Pueden alcanzar una velocidad de 220 km/h y una altitud de a 27.000 pies (unos 8.200 metros). Su radio de acción es de unos 150 kilómetros. Se sospecha que han sido utilizados para atacar bases rusas en Crimea y barcos en el mar Negro, en la bahía de Sebastopol.

SWITCHBLADE 600. Washington ha suministrado al ejército ucraniano decenas de estos aparatos fabricados en EE UU. A mediados de septiembre el Pentágono aprobó el envío de una nueva remesa por valor de 2,2 millones de dólares. Con un peso de 23 kilos, es capaz de destruir vehículos blindados, incluidos tanques gracias a una poderosa ojiva parecida al misil antitanque Javelin. Tiene una autonomía de vuelo de 40 minutos en los que puede recorrer 40 kilómetros.

KUB-BLA. Desarrollado por la empresa rusa fabricante del famoso fusil Kalashnikov, este dron tiene una envergadura de 1,2 metros y alcanza velocidades de 130 km/h. Ya fue utilizado por Rusia en la guerra de Siria y lo utilizó en los primeros meses de la invasión de Ucrania. Dotado de inteligencia artificial, cuando detecta un objetivo cae en picado y detona su carga explosiva. Contienen bombas de racimo para provocar el máximo daño a su alrededor.

MAVIC-3. Son drones comerciales de fabricación china, pero que han sido modificados para incorporarles cargas explosivas. Soldados ucranianos mostraron este verano imágenes en redes sociales de estos aparatos cargados con lanzagranadas estadounidenses. 

ELERON-3. Se trata de un dron de reconocimiento del ejército ruso fabricado por la empresa rusa Enics. Su fuselaje es como el de un avión y un motor eléctrico impulsa una hélice trasera. Está equipado con cámaras termográficas de visión nocturna