Empecemos por lo más jugoso, y es que aunque dentro de la raza fox terrier está la variedad de pelo duro, sin duda la más frecuente, y el fox terrier de pelo liso, no surgieron una de la otra, sino que se desarrollaron en paralelo desde una ascendencia, esta sí, compartida. Tal es así que el American Kennel Club tiene aprobados dos estándares separados, y que les da estatus de dos razas distintas. La Federación Cinológica Internacional también les dedica un estándar diferente a cada una, pero los considera variedades del fox terrier. El cruce entre ambas variedades no está permitido.
Son de origen británico, y parece que la raza se desarrolló a finales de 1700, coincidiendo con el apogeo en la sociedad inglesa por la caza del zorro. El animal debía introducirse en la madriguera para sacar al zorro, y ante la semejanza de tamaño de ambas especies, se buscaba ex profeso que estos perros lucieran colores inconfundibles para que no fueran disparados, y de ahí la selección de sus patrones con mucha presencia de blanco, fáciles de identificar durante la cacería.
No sabemos qué razas estuvieron implicadas en el proceso de creación con certeza, y toda la literatura existente sobre el fox terrier, tanto de pelo duro como liso, está llena de suposiciones sin ninguna fuente fidedigna. Nos tenemos que situar en 1870, por lo tanto, que es cuando ya existía un pedigrí de fox terrier, y fueron este grupo de perros, sensiblemente diferentes a los fox terrier modernos, de donde descienden los actuales, además de otras razas como el jack russell terrier.
El primer club fue fundado en 1876, el Fox Terrier Club de Inglaterra. Pese a sus orígenes ingleses, el fox terrier, en ambas variedades, son más numerosos en Estados Unidos, y de hecho el fox terrier de pelo liso está señalado como “raza nativa vulnerable” en el listado del Kennel Club británico, ante el alto riesgo de desaparición de la raza por ausencia de demanda y registros.
Ambas variedades tiene características físicas similares y son, en esencia, iguales, exceptuando el tipo de pelaje. Como hemos dicho, debe predominar el color blanco, con manchas negras o leonadas. En los dos fox terrier, las manchas rojas, atigradas o color hígado son indeseables.
Protectores, alegres y muy afectuosos en su núcleo familiar
Los fox terrier, como perros originalmente de caza, y cuya función aún se mantiene, son perros con fuerte personalidad y valientes. En el adiestramiento tienen fama de tercos, pero nada que no se resuelva mediante paciencia, refuerzo positivo y persistencia. Raza enérgica y de anatomía musculosa, necesita una actividad de ejercicio moderada a alta, y en el caso de la variedad de pelo duro, es una raza canina que puede someterse a cortes de pelo específicos. Se les describe como perros muy alegres, que muestran picos de carácter juguetón pero que en general son compañeros caninos tranquilos e incluso reservados en la convivencia, felices de tener su propio espacio y alejarse del trajín característico en un hogar doméstico. Se recomienda una sociabilización temprana si van a convivir con gatos u otros animales para evitar problemas de conducta, pero son aptos en la convivencia con niños pequeños.
Se puede ampliar información y localizar criadores oficiales a través del Club Español de Terriers, colaborador de la Real Sociedad Canina de España. Si se valora la adopción responsable, se recomiendan grupos de difusión de fox terrier y sus cruces como SOS Fox y Terriers de España.
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