Después de que la Generalitat de Cataluña haya declarado la mañana de este martes la alerta por sequía en 514 municipios, el de Barcelona incluido, el Ayuntamiento ya ha decidido qué medidas se tomarán en la ciudad ante la situación. A partir de este miércoles, las fuentes ornamentales que funcionan con agua potable, el 42%, se pararán. Además, el riego del arbolado con este tipo de agua se realizará solo en horario nocturno, ha explicado el concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Eloi Badia.
Así pues, únicamente estarán en marcha las fuentes ornamentales de agua freática -la Font Màgica de Montjuïc pertenece a este grupo, pero está cerrada por trabajos de mantenimiento- y las que se utilizan para beber, pues se consideran "servicios esenciales", ha dicho. Si se riega en algún punto el arbolado durante el día, también será con este tipo de agua.
Por otro lado, el consistorio, que ha activado la Fase de Alerta del Protocolo de actuación por situación de sequía de la ciudad, no permitirá a los ciudadanos llenar piscinas privadas que no tengan un sistema de recirculación. También les impedirá lavar vehículos con mangueras.
Asimismo, únicamente se podrán regar jardines privados dos veces por semana -los miércoles y los sábados en viviendas con números pares y los jueves y los domingos en las que los tienen impares-. Preguntado por cómo se controlará que los barceloneses cumplan, Badia ha dicho que la empresa concesionaria, Aigües de Barcelona, hará seguimiento de su consumo y comunicará al Àrea Metropolitana de Barcelona casos que sean sospechosos.
La limpieza de la vía pública, ha señalado el concejal, no se verá afectada, porque la mayoría de camiones, un 80%, utilizan agua freática.
Sobre las piscinas municipales, ha afirmado que tienen un sistema de recirculación, lo que permitirá que sigan funcionando con normalidad.
Badia ha dicho que si la situación empeora, las restricciones, que pretenden lograr la reducción del 5% del consumo que fija el decreto de Alerta Hidrológica, irán 'in crescendo'. Si por ahora son "mínimas", ha señalado, es porque a raíz del fuerte episodio de sequía que hubo de mayo 2007 a diciembre 2008, el Ayuntamiento reforzó las políticas de ahorro de agua. En aquel entonces había un consumo de 170 litros al día por ciudadano, mientras que ahora es de 147. Además, los servicios municipales utilizan un 11% menos de agua. Han reducido la potable en un 18% y han incrementado la freática en un 51%.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios