Ante el descenso de las temperaturas y el cambio de tiempo, muchas personas se preguntan cómo ahorrar este invierno con la climatización en la vivienda, ya que los precios de la energía continúan disparados en máximos históricos. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), "cada hogar se gasta unos 750 euros al año en calefacción", siendo los acumuladores y radiadores eléctricos los sistemas más costosos este año. 

En este sentido, tras calcular el coste anual de calentar una vivienda de 90 metros cuadrados, la OCU destaca que la aerotermia y la calefacción con biomasa son las dos tecnologías más eficientes para ahorrar en la factura mensual. Sin embargo, una de las desventajas de la aerotermia en comparación con otros sistemas es que la inversión inicial es más elevada, con un precio que oscila entre los 8.000 y 24.000 euros, según los expertos de Selectra.

Cómo funcionan estos sistemas

La aerotermia es un sistema de energía emplea bombas de calor y que funciona extrayendo la energía del aire exterior para climatizar después los espacios de la vivienda. "Se basa en el uso de bombas de calor, unos aparatos capaces de transferir el calor desde un fluido más frío a otro más caliente", detallan en la OCU.

Por su parte, la bomba de calor aire-agua también dispone de una unidad exterior que "capta el calor del aire y lo conduce a la unidad interior, donde se produce el intercambio, en este caso calentado agua en lugar de aire", explica la organización. El agua caliente se transfiere a los radiadores o suelo radiante para producir calefacción, o bien se almacena como agua sanitaria.

El gran inconveniente para instalar un sistema de aerotermia es el coste inicial, aunque es cierto que se amortiza con el posterior ahorro energético. No obstante, existen una serie de subvenciones para la realización de instalaciones térmicas con aerotermia a nivel residencial.

Como explican en Selectra, estas ayudas provienen del 'Plan de Recuperación para Europa Next Generation EU' y del 'Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España'. "Estos fondos pretenden incentivar la creación de instalaciones verdes, favoreciendo la transición desde las energías fósiles a las renovables y, con ello, reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno y dióxido de azufre", detallan.

En qué consisten y cuantías

Estas subvenciones están reguladas en el Real Decreto 477/2021, de 29 de junio, y el plazo de solicitud está abierto hasta el 31 de diciembre de 2023. Este programa de ayudas "incluye entre sus actuaciones subvencionables la tecnología solar térmica, biomasa, geotérmica, hidrotérmica o aerotérmica (exceptuando las tecnologías aire-aire) para climatización y/o agua caliente sanitaria en viviendas. Las ayudas varían entre el 40% al 70%, en función de la tecnología utilizada", explican desde el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).

Las subvenciones, cuyo plazo de solicitud comenzó en julio de 2021, se otorgan mediante el sistema de "concurrencia simple", por lo que son atendidas por orden de presentación hasta que se agoten los fondos del programa.

Las ayudas para la instalación de sistemas de aerotermia se componen de dos conceptos, como detallan en Selectra. Por un lado, la ayuda base, que es "valor fijo por unidad de potencia de la bomba de calor de aerotermia". Así, la cuantía base de las ayudas son:

Por otro lado, se establece una ayuda adicional que se suma a la base y que se otorga si se tiene que adecuar el sistema de calefacción al nuevo equipo de aerotermia para obtener un mayor rendimiento, como por ejemplo con suelo radiante o radiadores de baja temperatura. En estos casos, las ayudas serán las siguientes:

Cómo solicitar estas ayudas

El primer paso es solicitar un presupuesto para la instalación a una empresa instaladora o, si ya se ha realizado, recopilar la factura con los gastos. Cada comunidad autónoma ha habilitado una web para tramitar la ayuda, por lo que deberás acudir a la sede electrónica de la comunidad en la que residas y acceder al programa. 

El órgano competente de la comunidad tendrá que comunicar en un plazo máximo de 6 meses la resolución de la ayuda desde que se presenta la solicitud. En el caso de no recibir una respuesta, se entiende que ha habido un desistimiento. Si se recibe una respuesta positiva, la persona interesada tendrá un plazo de 18 meses para realizar la inversión y, una vez finalizada, la comunidad procederá a abonar la subvención.