Cómo conseguir que nuestro perro haga sus necesidades durante los paseos y no en casa

Un perro orinando en el árbol de un parque.

Uno de los retos a los que nos enfrentamos cuando tenemos un perro en casa (especialmente si éste es un cachorro) es que tendremos que enseñarles a hacer sus necesidades durante los paseos y evitar así los escapes dentro de casa. Esto es algo que debemos hacer bien desde que son muy jóvenes.

"Si el cachorro no hace los paseos adecuados durante los primeros meses, no va a querer orinar o defecar en la calle ya que, muchas veces se trata de un lugar hostil para ellos", explica Sonia Losada, profesora en activo del curso profesional de Educación canina y Adiestramiento de l’Escola d’oficis de Catalunya y conocida como Xila's Training.

Para entenderlo mejor, Losada lo compara con cómo nosotros preferimos esperarnos a llegar a casa y usar nuestro baño, en vez de usar los públicos que podemos encontrar por la calle.

"Hay que valorar qué es lo que le da miedo o le incomoda del entorno, qué le estresa y causa que se aguante para hacerlo en casa", explica la educadora canina. "Porque no lo hace por fastidiarte, eso hay que tenerlo claro".

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La reacción en casa y el refuerzo positivo en la calle

Para lograr que nuestro perro se sienta cómodo haciendo sus necesidades en la calle y que aprenda a no hacerlo en casa es importante tanto cómo reaccionamos nosotros en el hogar ante sus "escapes", como qué hacemos cuando orina o defeca en la calle.

"Si lo hace en casa debemos actuar como si no hubiera pasado nada e intentar que no nos vea limpiarlo, ya que a veces la fregona es algo con lo que jugar y, por tanto, algunos perros llegan a mearse directamente ahí para llamar nuestra atención", cuenta Losada.

Es importante que no les riñamos por esta conducta (ni por cualquier otra) y que "le estamos dando atención". "Regañarle es uno de los mayores reforzadores que existen, con lo cual, debemos evitarlo a toda cosa", insiste la educadora canina.

Hay que propiciar que lo haga fuera, yo lo llamo 'hacer una fiesta', exagerar mucho nuestra felicidad y que nos note alegres

Lo que sí premiaremos y reforzaremos serán las veces que nuestro peludo haga pipi y caca en la calle. "Voy a propiciar que lo haga fuera con premios o caricias", explica Losada. "Yo lo llamo hacer una fiesta, exagerar mucho nuestra felicidad, aplaudirle, hacer un poco el tonto y que nos note alegres. Esto me funciona casi más que darles un premio".

Además, hay algunos trucos para conseguir que el perro haga sus necesidades fuera. "En el caso de los cachorros, después de comer, beber y jugar, van a querer hacer pis, por lo que si damos un paseo en esos momentos, lo va a hacer fuera", aconseja la experta en conducta canina.

"También es importante que, cuando paseamos con ellos, les llevemos a lugares con césped o tierra, donde otros perros hayan hecho pis y dejar que huela, para que les anime a ellos a hacerlo ahí también", concluye Losada.