Este 28 de diciembre, Día de los Inocentes, María Patiño ha sido víctima de diversas bromas. Y es que la colaboradora se trasladaba a la puerta de la casa de Isabel Preysler para intentar obtener información de su ruptura con Mario Vargas Llosa. Sin embargo, lo que ha recibido han sido inocentadas.

"¿Quién es usted?", le ha preguntado la reportera a un hombre que llegaba al domicilio. "Un amigo de Fernando", le contestaba entonces. "Ah, ¿que aquí no vive Isabel Preysler?", le preguntaba. Ante la negación del chico en el coche, la colaboradora se mostraba confundida. 

"¿Me ha engañado?", le cuestionaba. Finalmente, el amigo de la familia le decía la verdad. Y es que la colaboradora se encontraba realmente en la casa de Preysler. Poco después, le sonaba el móvil. "¡Me están llamando desde dentro!", se emocionaba la colaboradora. 

La persona al otro lado del teléfono le ofrecía entrar en la casa: "¡Sí, quiero!", ha contestado realmente emocionada. No obstante, acto seguido el anónimo colgaba. "Me están tomando el pelo, es una broma", caía entonces Patiño. 

"Yo pensé que este era un barrio serio", se justificaba ante las risas en plató. Un número oculto la volvía a llamar. "Feliz día de Los Santos Inocentes me han dicho", ha declarado, decepcionada. Sus compañeros han vuelto a reírse por la broma.

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De nuevo, al marcar un número que le habían enviado supuestamente del hogar de la celebrity, le contestaba una clínica dental. "Hoy te estás comiendo todas, María", le decía Kiko Hernández entre risas. Finalmente, María Patiño se ponía en contacto con el servicio de Preysler, quien le indicaba que ella estaría de viaje.