El petauro del azúcar, un animal que no se puede criar ni vender: "Es muy complicado recrear la vida que tendrían en libertad"

Un petauro del azúcar en una foto de archivo.
Un petauro del azúcar en una foto de archivo.
WIKIMEDIA COMMONS
Un petauro del azúcar en una foto de archivo.

En los últimos años podemos ver con más frecuencia animales exóticos en los hogares. Mientras que ha sido común ver cobayas, conejos o todo tipo de roedores pequeños como hámsteres o ratones, ahora también podemos ver, especialmente a través de redes sociales, otras mascotas todavía más exóticas. Un ejemplo de ellas son los petauros del azúcar.

¿Conoces esta adorable especie? Estos animales son legales en la Península Ibérica y Baleares, pero desde 2019 no se puede ni criar, ni comercializar con ellos en Canarias, donde han entrado en la lista de especies exóticas invasoras, aunque aquellos que tienen ya un petauro pueden seguir teniéndolo sin problema, eso sí, es obligatorio que estén censados.

"Son animales que pueden tenerse en el hogar pero, bajo mi punto de vista, es muy complicado recrear la vida que tendrían en libertad, en cautividad, sobre todo por la alimentación", detalla Sara Acebo, veterinaria especializada en animales exóticos y fundadora del canal de Instagram Exotips. "Son animales que viven en Australia, Nueva Guinea y otras islas cercanas, en las que se alimentan de gran cantidad de alimentos como savia, flores, néctar, insectos e incluso pequeños vertebrados".

Según Acebo, cuando se adentran en nuestros hogares, debido a su nombre (petauro del azúcar) se tiende a cometer el error de ofrecerles alimentos dulces y fruta, lo que les lleva a padecer enfermedades graves debido a una dieta no equilibrada.

La vida del petauro del azúcar en el hogar

Los petauros del azúcar son animales que "deben vivir en pareja o grupos reducidos con varias hembras y un solo macho, ya que son animales muy territoriales", asegura Acebo. 

En cuanto a la relación con las personas, "aunque pueden llegar a interactuar mucho con nosotros, no siempre es así. Los hay más reticentes al contacto, cada uno tiene al final su carácter", explica la veterinaria de exóticos. "En cualquier caso, no son peligrosos pero pueden llegar a morder y hacer daño".

En su hábitat natural "viven en bosques de acacias y eucaliptos, por lo que debemos mantenerlos en un espacio lo más amplio posible (mínimo 1,5 metros de altura y un metro de ancho)". "Hay gente que los tiene en jaulas de gran tamaño solo para ellos o incluso en habitaciones dedicadas a este fin, sin jaulas, pero todo tiene que estar muy controlado y adecuado para ellos", insiste Acebo.

Para los animales que son presas, vivir en el suelo es estresante y, aunque en casa no haya peligro, se sienten más seguros en lugares altos

"Su espacio debe tener más altura que anchura y, si viven en jaula, la distancia entre los barrotes debe ser poca para evitar que se escapen", añade. "Son animales nocturnos por lo que es muy importante que, durante el día, no tengan mucha luz en sus habitáculos que pueda dañar sus ojos".

En cuanto a las condiciones, "necesitan una temperatura templada (unos 25 grados) y, si ésta baja, estarán escondidos en sus nidos, bien acurrucados para evitar el frío", comenta la especialista. "Trepan, saltan y juegan mucho, por lo que necesitan lianas, estanterías... sitios donde puedan desarrollar estas actividades".

"También necesitan escondites y nidos para poder descansar durante el día y, preferiblemente debemos colocarlos en la zona alta del habitáculo, ya que ellos prefieren estas localizaciones", recomienda. "Para los animales que son presas, vivir en el suelo es mucho más estresante y aunque en casa no corran ese peligro, ellos se sienten más seguros en lugares altos".

Una complicada alimentación

La dieta de los petauros del azúcar varía según la época del año. "En época de cría (primavera-verano), su dieta se compone de más insectos y arácnidos (ya que es cuantos más hay); mientras que en otoño e invierno se nutren de savia, resina e insectos que hayan podido quedar atrapados en las mismas", detalla Acebo.

"Cuando están en libertad comen más o menos entre el 15 y 20 por ciento de su peso a diario, pero en cautiverio, como su gasto energético es menor, debemos ir controlando", advierte la experta en exóticos. "Con el un 10 o 15 por ciento seguramente sea más que suficiente".

Cuando están en libertad comen más o menos entre el 15 y 20 por ciento de su peso a diario, pero en cautiverio con un 10 o 15 por ciento es más que suficiente

La veterinaria explica que, lo normal es que el cuidador elabore una dieta a base de papillas, mezclando varios ingredientes del mercado y variando durante la semana. "Existen multitud de dietas y las papillas se pueden comprar ya hechas (específicas para petauros) para después añadirle otros alimentos que completen su alimentación de la forma más equilibrada posible", detalla.

"Podemos dar una pequeña porción de néctar de loris a la semana, por ejemplo e insectos dos veces por semana", propone. "No obstante, como ya he dicho, son dietas muy complicadas de hacer por nosotros mismos, siendo la mejor idea acudir a nutricionistas especializados o expertos en estos animales".

Inés López
Colaboradora '20minutos'

Soy Inés López García. Me formé en la Complutense con la intención de acabar informando sobre animales y medioambiente. Tuve mi primera oportunidad laboral en el medio local 'Madridiario'; luego entré en '20minutos', donde pude escribir sobre cine, series y videojuegos, mis tres hobbies. Me mudé a Londres para mejorar el inglés y escribir sobre el Brexit y el covid en la distancia. En la actualidad escribo sobre lo que siempre quise, animales, en la sección Animaleros de '20minutos'.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento