Con las bajas temperaturas y las lluvias llegan las temidas humedades a la vivienda y uno de los grandes enemigos: el moho. Limpiar todas las superficies del hogar es imprescindible, sobre todo en el baño, ya que la condensación y la humedad pueden dar lugar a la aparición de moho negro tóxico en la bañera, ducha o en el inodoro.

De hecho, es muy frecuente que comience a aparecer en las juntas y en la silicona de la ducha o bañera, sin tener en cuenta que este tipo de moho puede ser realmente perjudicial para nuestra salud. Uno de los principales peligros si no se elimina y se previene con regularidad es la aparición de problemas respiratorios, así como alergias, asma o urticaria.

Trucos infalibles para eliminar el moho

En este sentido, la principal recomendación para evitar su aparición es ventilar frecuentemente las estancias de la vivienda, sobre todo el baño después de ducharnos. De lo contrario, no se secará correctamente, y contribuirá a que haya una mayor condensación. 

Dos productos esenciales para la limpieza del baño son la lejía y el cloro, así como el amoniaco, ya que eliminan eficazmente el moho adherido a la silicona. Para ello, prueba a mezclar un poco de amoniaco con agua y viértelo en aquellas zonas en las que haya moho. Para que haya buenos resultados, debemos dejar que actúe esta mezcla durante 15 o 20 minutos. Después, con un paño, limpia la superficie para arrastrar cualquier resto.

Otra opción es mezclar agua con lejía y aplicarlo con un trapo húmedo por la bañera o ducha. Asimismo, otro truco infalible es utilizar vinagre blanco y bicarbonato de sodio, junto con agua. Aplica la mezcla en las juntas de la bañera o zonas afectadas y deja que actúe durante 20 o 30 minutos, para después limpiarlo con un trapo limpio. 

También puedes utilizar un cepillo, puesto que resultará más sencillo para arrastrar el moho de la silicona. Por último, conviene cambiar la silicona por una nueva cada cierto tiempo, ya que con el paso de los meses empieza a desgastarse.