Galesa como él y sin redes sociales: así es Emma Rhys-Jones, la mujer con la que lleva Gareth Bale desde la adolescencia

Ha sido toda una sorpresa para cualquier amante del deporte. Es cierto que en sus últimas temporadas no fue el jugador más centrado en su trabajo y más inspirador, pero no por ello se barruntaba que lo hiciera de una forma tan "inmediata" y sin marcha atrás quedándole aún en sus botas tantos partidos para buenas jugadas y mejores goles: Gareth Bale se ha retirado del fútbol profesional a los 33 años y explicaba además que en nada se va a embarcar en "una nueva aventura" que pronto anunciará. Quien a buen seguro estará a su lado será la misma mujer que lleva dos décadas haciéndolo, a pesar de que su nombre no sea tan conocido. Hablamos de su esposa, Emma Rhys-Jones.

Emma nació, al igual que el exdelantero de Real Madrid y Tottenham, en Cardiff, la capital de Gales, solo que dos años después que su ahora marido. Pasó poco tiempo en sus vidas hasta que se conocieron, dado que a pesar de que es una ciudad de algo más de un millón de habitantes, a principios de milenio, cuando apenas contaban ambos con una edad cercana a los 12 años, se conocieron: estudiaban en el mismo colegio. Desde entonces, siempre han estado juntos.

Cuando terminó el instituto, Emma comenzó a trabajar de peluquera en su ciudad natal. Mientras, el futbolista daba sus primeros pasos sobre el césped, aunque su verdadero despegue llegaría en 2006, cuando le ficha el Southampton. Una temporada bastó para que el Tottenham le fichase y tres temporadas después, en 2011, viviría a su lado una de sus noches más mágicas: un hat-trick ante el Inter de Milán en la Champions que le puso en punto de mira de los grandes de Europa, hasta que en 2013 se hizo oficial su traspaso al Real Madrid.

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Un año antes, el 21 de octubre, en Cardiff, había nacido la primera hija del matrimonio, Alba Violet, mientras que la segunda, Nava Valentina, llegaría al mundo en la misma ciudad el 22 de marzo de 2016. Poco después, en julio de ese mismo año, Emma y Gareth se comprometían. El 8 de mayo de 2018, Emma daba a luz al primer hijo varón de la pareja, Axel Charles. En 2021 llegaría el último de los vástagos del matrimonio, Xander Frank. Pero lo curioso fue que fue el primero que nació cuando Emma y Gareth ya eran marido y mujer.

Y hablamos de curiosidad porque, cuando se dieron el "Sí, quiero" a primeros de julio de 2019 en sa Fortalesa, en el puerto de la Pollença, Mallorca, era la cuarta vez que intentaban pasar por el altar. Pero las tres anteriores habían sido imposibles debido a unas situaciones rocambolescas y casi de película de Hollywood que atañen, sobre todo, a la familia de Emma, dado que los Rhys-Jones han sido siempre un clan con un enorme historial delictivo.

Todo empieza en el primer intento, en 2016. Aquel agosto, Martin Rhys-Jones, padre de la novia y suegro de Bale, que llegó a rehacer su vida con una florista rusa a la que dobla en edad, es extraditado a Estados Unidos con una condena de seis años de cárcel por un fraude por valor de 2,5 millones de euros a unas 250 víctimas. Entre ellas, un enfermo de Alzheimer. Y se aplaza a mayo de 2017.

Aquel año es nefasto para Emma y Gareth. Todo empieza con John y Eva, los abuelos maternos de Emma, quienes se vieron envueltos en una guerra de drogas por una maleta con más de 750.000 euros euros en cocaína, objetos valiosos y efectivo que desapareció de la noche a la mañana porque la prima de la novia, Epiphany Dring, se lo llevó en bote a Malasia.

En noviembre, el cuerpo de Alexander William, de 29 años y pareja de Katie, hermana de Emma, quien acababa de dar a luz a su segundo hijo, es encontrado sin vida -aparentemente se suicidó- en pleno proceso de investigación de los servicios sociales, como informaron varios medios. Emma se desplaza a Cardiff para estar con su hermana y la boda de 2018 también se aplaza.

Ello no fue óbice para que la mafia persiguiese a varios miembros de la familia Rhys-Jones y apareciesen calcinados el coche y el buzón de dos de las tías de Emma o se encontrasen más de 60.000 euros escondidos en la chimenea de otro de sus tíos. Además, Emma Cummings, la dama de honor y mejor amiga de la novia, es condenada a año y medio de cárcel por blanqueo de capitales, ya que colaboraba, introducida en el mundillo por su novio (quien ya había estado en prisión por la misma razón), con una mafia que tenía conexiones en Dubái, Nueva Zelanda o Canadá.

Es por ese historial que se entiende que Emma Rhys-Jones, a diferencia de otras parejas de jugadores tan mediáticos como su marido, como Georgina Rodríguez o Alice Campello, busque continuamente la privacidad que da el no tener redes sociales ni dar a conocer prácticamente nada de su vida privada, puesto que apenas sale incluso en el Instagram de Gareth Bale. Ambos viven alejados del mundanal ruido y, de hecho, se desconoce, a sus 31 años, a qué se dedica.