Ceuta

Dictan prisión sin fianza para Cristian, el detenido en Ceuta como presunto asesino del niño Mohamed

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Ceuta ha ordenado, a petición de la Fiscalía, el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de Cristian, el único detenido por el presunto asesinato de Mohamed, el niño de 8 años cuyo cuerpo fue encontrado el pasado 19 de diciembre.

La decisión se ha adoptado después de que el arrestado fuera trasladado este jueves a las dependencias judiciales, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

El hombre, detenido este miércoles por la Policía Nacional como presunto autor del asesinato de Mohamed, confesó el crimen en las dependencias de la Jefatura Superior, según han confirmado fuentes de la investigación a El faro de Ceuta. No obstante, este jueves se ha acogido a su derecho a no declarar durante su comparecencia judicial.

Con asistencia de una letrada, el interrogatorio del sospechoso en la Jefatura Superior se llevó a cabo dentro de las instalaciones de la Policía, donde el arrestado, un varón ceutí de 34 años, confesó haber acabado con la vida del pequeño Mohamed. El presunto asesino tiene antecedentes policiales por delitos de agresión sexual y de robo con intimidación.

El detenido cuenta con un único antecedente judicial tras ser condenado por el Juzgado de lo Penal número 2 a seis meses de cárcel por un delito de robo con violencia por unos hechos ocurridos en el año 2013, mientras que el resto de antecedentes, si los hubiera, serían policiales y no judiciales, según el TSJA.

La causa será investigada por el Juzgado de Instrucción número 6 de Ceuta al encontrarse de guardia cuando ocurrieron los hechos, que están bajo secreto de sumario.

El cuerpo del niño Mohamed Abdeselam, de 8 años, fue localizado a primeras horas de la mañana del pasado 19 de diciembre en un terraplén próximo a su vivienda particular con varias heridas.

Desde ese momento, la Policía Nacional, a través de la Policía Científica, ha mantenido varias líneas de trabajo sin descartar ninguna hipótesis sobre el fallecimiento del niño.

La autopsia reveló la muerte violenta

La autopsia reveló que el menor había fallecido de forma no accidental, siendo necesaria la intervención de dos forenses para recoger restos en el cuerpo del niño, que fueron enviados a Madrid para su análisis.

El pequeño, que cursaba 3º de Primaria en el colegio Severo Ochoa, tenía dos hermanos de 18 y 21 años y una hermana de 14 años.

El cadáver fue hallado en un descampado con terraplén, con basura alrededor, en una zona de monte muy próxima al lugar donde el niño vivía, cerca del Hospital Universitario de la ciudad, en el entorno de la barriada de Loma Colmenar.

Esa misma madrugada su familia había presentado una denuncia en la Jefatura Superior de Policía por la desaparición del menor, que había salido de casa para disputar un partido de fútbol con unos amigos. Al ver que no regresaba, fue el padre quien acudió a la policía. 

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