El Gobierno central ha dado otro paso más en la futura y muy demandada conexión ferroviaria entre la estación de tren de Santa Justa y el aeropuerto de Sevilla, avanzando así en un camino que, no obstante, sigue discurriendo en paralelo al ya iniciado, y casi terminado, por la Junta de Andalucía.
La ministra de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha anunciado en Sevilla que el Ejecutivo central ha adjudicado este mismo jueves el contrato para la redacción del estudio informativo del mencionado enlace, con un coste de 642.000 euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de dos años.
El objetivo de este estudio es elegir la mejor alternativa de conexión entre la estación y el aeropuerto, y para ello se analizará, "con el grado de definición y precisión acorde a este tipo de estudios", un número "suficiente" de opciones de trazado que, posteriormente, "serán comparadas bajo consideraciones técnicas, económicas, medioambientales y de explotación".
Este mismo estudio es el que la Junta de Andalucía adjudicó por su cuenta, alegando "falta de interés" por parte del Gobierno, en enero de 2022 por menos de la mitad del dinero que supone el encargado por el Estado, concretamente, 309.120 euros, y cuyas conclusiones estarán listas este verano, según han confirmado fuentes de la Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda a 20minutos.
El propio presidente de la Junta, Juanma Moreno, que ha participado con la ministra Sánchez en la firma de un convenio para la construcción de viviendas en alquiler a precios asequibles, ha puesto "a disposición" del Ministerio los resultados del estudio encargado por su Ejecutivo. "Creo que es interesante porque hemos hecho un esfuerzo económico importante", ha manifestado Moreno, sin que por el momento el Gobierno central haya recogido el guante.
Desde la Consejería lamentan que se "duplique" el gasto económico con la elaboración de un estudio por parte del Gobierno central que es "exactamente" el mismo que el que la Junta está a punto de concluir. Pero, sobre todo, apuntan a las consecuencias que esta duplicidad tendrá en los plazos, toda vez que el Estado no podrá abordar los siguientes pasos del proyecto hasta dentro de dos años, cuando finalice su estudio informativo, mientras que si tomara en consideración el de la Junta, los plazos se podrían acortar un año y medio.
Y es que, una vez que se decida cuál es la mejor alternativa de conexión, aún habrá que licitar las obras, adjudicarlas y ejecutarlas, por lo que la ansiada conexión con el aeropuerto, que aspira a recibir diez millones de pasajeros al año, no será una realidad hasta dentro de mucho tiempo.
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