El PSOE se apoya en el PP para que su reforma del 'solo sí es sí' se tramite por vía de urgencia pero no se debatirá hasta la víspera del 8M

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (i) y el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo (d), en Moncloa.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo.
EP
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (i) y el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo (d), en Moncloa.

La Mesa del Congreso dio este martes luz verde a que la proposición de ley con la que el PSOE quiere reformar la ley del 'solo sí es sí' se tramite por la vía de urgencia. Y lo hizo gracias a la mayoría que suman en el órgano de gobierno de la Cámara Baja PSOE y PP, a cuyos votos se unieron los de Vox, que también apoyó el empleo de un método de tramitación que reduce a la mitad los plazos para que los grupos puedan presentar enmiendas al texto. El primer debate de la proposición de ley, no obstante, no tendrá lugar hasta el día 7 de marzo, en la víspera del 8M, Día Internacional de la Mujer.

Los socialistas solicitaron la semana pasada la declaración del procedimiento de urgencia en virtud del artículo 93 del reglamento del Congreso, que establece que "a petición del Gobierno, de dos grupos parlamentarios o de una quinta parte de los diputados, la Mesa del Congreso podrá acordar que un asunto se tramite" por esta vía. El PSOE, en concreto, utilizó la tercera posibilidad y refrendó su petición con la firma de sus 120 parlamentarios, incluida la propia presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet.

Lo que se ha hecho este martes es discutir ese procedimiento de urgencia en la Mesa y votar su aprobación, a la que han dado luz verde los tres representantes del PSOE,  los dos del PP y el único diputado de Vox en el órgano. Por ende, los socialistas consiguen dar un acelerón con respecto a su decisión inicial de no forzar el reglamento del Congreso para apresurar la tramitación de su proposición de ley reduciendo a la mitad los plazos para enmendar la norma.

No obstante, el PSOE ha fracasado en su segundo objetivo: que la Junta de Portavoces le permitiera modificar el orden del día del Pleno de la semana que viene para que se debatiera el martes día 21 de febrero la toma en consideración de su propuesta, el primer obstáculo a superar por el texto para iniciar su tramitación. Los socialistas pidieron este martes al resto de los grupos que aceptaran este cambio, pero al tratarse de la modificación de un orden del día ya aprobado, necesitaban unanimidad para que se llevara a cabo. Y ERC y EH Bildu se han opuesto, por lo que la solicitud se ha rechazado.

Eso implica que el debate de toma en consideración tendrá lugar el 7 de marzo, víspera del 8M, dado que la primera semana de marzo no hay Pleno agendado en el Congreso y el portavoz del PSOE en la Cámara Baja, Patxi López, descartó pedir a la presidenta Batet que convoque uno extraordinario. Una vez superada esa toma en consideración se tendrá que abrir el plazo para presentar enmiendas, lo cual sumará una semana más a la tramitación, sin contar con que después el texto tendrá que votarse en un nuevo Pleno y enviarse al Senado.

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, justificó su decisión de impedir que la toma en consideración de la propuesta del PSOE se vote el martes que viene asegurando que "sería extraterrestre" facilitar que se acelere la tramitación de la reforma del solo sí es sí "sin el acuerdo de aquellos que crearon y negociaron esta ley", es decir, el Ministerio de Igualdad. Se trata de la segunda vez en apenas unos días que Rufián se reafirma en que ERC no apoyará ninguna modificación legal que no cuente con el beneplácito del departamento que dirige Irene Montero, y en similares términos se pronunció el portavoz adjunto de EH Bildu, Oskar Matute, que afirmó que "no tendría sentido" hacer otra cosa.

Minutos después de confirmarse que la toma en consideración de la propuesta se debatirá y votará el día 7 de marzo, el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, afeó a ERC y EH Bildu que hayan torpedeado la petición de los socialistas para acelerar los trámites. "Esto se va a alargar, pero cuanto antes cerremos esta herida de la ley, mejor", espetó López, que insistió en la "urgencia" de "parar la sangría y la alarma que está generando la rebaja de condenas" y "la excarcelación de algunos delincuentes sexuales" en aplicación de la nueva ley.

Igualdad, en aparente calma: "Hay tiempo"

En el Ministerio de Igualdad mantienen la calma por ahora. Ven el 7 de marzo como una fecha todavía lejana en el calendario, y mantienen la esperanza de poder alcanzar un acuerdo con el PSOE en las próximas semanas. "Hay tiempo", subrayan a 20minutos fuentes del entorno de Irene Montero, quienes recuerdan que no es la primera vez que leyes de su departamento levantan ampollas entre los socios de la coalición, como ocurrió con la ley trans o la de igualdad de trato. 

Eso sí, ven "preocupante" que "prefieran pactar con el PP y no negociar con su socio de Gobierno" para llevar una propuesta conjunta "como piden los grupos". Este lunes, de hecho, Montero emplazó a los interlocutores de la negociación, Patxi López y María Jesús Montero, a retomar las conversaciones en pro de un acuerdo. Sin embargo, han pasado más de 24 horas y los morados todavía no han recibido respuesta alguna. 

La secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez, ha asegurado este martes durante una entrevista en RTVE que su departamento ha llegado a poner hasta una decena de propuestas sobre la mesa. Todas rechazadas por los socialistas en los tres meses que llevan hablando para reformar la ley de libertad sexual. Lo que sugiere Igualdad va fundamentalmente en tres direcciones: o bien elevar las penas mínimas de los delitos más graves; introducir la violencia y la intimidación, pero como agravantes (y no como subtipos, como quiere el PSOE); o elevar la pena a la mitad superior de la horquilla si la víctima conocía a su agresor. 

Con todo, los morados asumen que, con los plazos establecidos, la ley no sea aprobada definitivamente hasta finales de abril. El 7 de marzo de se debate la toma en consideración en la Cámara Baja, pero, si se da el visto bueno, el proyecto deberá contar todavía con el beneplácito del Senado antes de ser aprobado definitivamente, siempre y cuando no se incorporen modificaciones ahí, pues entonces volvería al Congreso. 

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