El Canal inicia un "cambio masivo" de todas las tuberías antiguas tras las inundaciones

El Canal de Isabel II ha comenzado ya la primera fase del Plan Red, un proyecto con el que se renovarán hasta 350 kilómetros de las tuberías antiguas de la ciudad de Madrid para evitar que se produzcan nuevas roturas y, con ello, más inundaciones. Los trabajos estarán focalizados en las canalizaciones que se han quedado obsoletas o están deterioradas por el paso del tiempo para cambiarlas por unas nuevas fabricadas con materiales más avanzados como la fundición dúctil. Se trata de un "cambio masivo" de las conducciones, según informan fuentes de la empresa de gestión del agua en la Comunidad de Madrid a 20minutos.

Actualmente, los trabajos de renovación se están llevando a cabo en los distritos de Carabanchel, Centro, Ciudad Lineal, Latina, Moncloa-Aravaca, Puente de Vallecas, Salamanca, San Blas, Tetuán y Villaverde. Estas obras forman parte de la primera fase del plan, que comenzó en 2022, y suponen la sustitución de 48 kilómetros de la red de suministro. 

Las próximas actuaciones previstas afectarán a los distritos de Arganzuela, Carabanchel, Ciudad Lineal, Latina, Moncloa-Aravaca, Usera y Villaverde. Esto supondrá el cambio de 17 kilómetros de las tuberías situadas en estos emplazamientos. Además, una de las intervenciones más destacadas será en la Glorieta de Carlos V, frente a la estación de tren de Atocha, y zonas aledañas.

Las tuberías más antiguas están en el sur

La zona sur de la ciudad de Madrid suele ser la que más fracturas de tuberías sufre y, con ello, donde ocurren más inundaciones. El motivo, según apuntan desde el Canal de Isabel II, es que allí están localizados los "tramos más antiguos del sistema de suministro". El paso del tiempo y los años de servicio son los factores que hacen que sea "más probable que puedan sufrir roturas fortuitas", indican. 

Aunque las intervenciones para la renovación de la red de suministro se van a realizar en prácticamente toda la ciudad, las zonas en las que se van a llevar a cabo más obras, al menos en la primera parte del plan, son los distritos del sur de Madrid. Y es que han sido los barrios situados en esta ubicación los que han sufrido las últimas grandes inundaciones.

El pasado mes de septiembre, la glorieta Marqués de Vadillo y las calles de su alrededor se llenaron de agua como consecuencia de la rotura de una tubería del Canal de Isabel II. El problema se vio agravado debido a las fuertes lluvias que cayeron durante todo ese día. De hecho, se cortó el tráfico en la M-30 debido a que era imposible circular por la vía.

Otro barrio del sur que también sufrió inundaciones recientemente fue el de San Isidro, en el distrito de Carabanchel. La zona más afectada fue la calle Tejares, donde todavía hay algunos garajes que tienen agua en su interior. La Comunidad de Madrid ha pedido a la empresa un estudio de la red de saneamiento para diagnosticar globalmente problemas que hasta ahora se estaban tratando de manera individual y que en realidad están interrelacionados entre sí.

La empresa encargada de la gestión del agua en la Comunidad de Madrid están llevando a cabo un "cambio masivo de tuberías". Pretenden de esta manera reparar los fallos que existen en este momento en la red de suministro motivados por su antigüedad. "En 2022, gracias al arranque efectivo de este operativo, los kilómetros renovados casi se han duplicado respecto a la media histórica anual", comentan. De hecho, solo en el último año los kilómetros de conducciones nuevas ascienden hasta los 190. 

Actuaciones en 1.200 kilómetros

El Consejo de Administración de Canal de Isabel II aprobó en julio de 2021 la que se ha convertido en la mayor inversión realizada por la empresa hasta la fecha. Se trata del contrato para la renovación de 1.200 kilómetros de tuberías de red de abastecimiento de agua en 163 municipios de la Comunidad de Madrid. Se trata de una dotación económica que irá destinada a la primera fase del Plan Red, que tiene un tiempo de desarrollo de cuatro años.

El Plan Red está centrado principalmente en el reemplazamiento de las canalizaciones obsoletas por otras de materiales más avanzados y modernos, como puede ser la fundición dúctil— hierro aleado con grafito—, ya que presenta una mayor resistencia y dureza. Además, aprovechando estos cambios, se van a colocar cables y dispositivos necesarios para permitir la transmisión de información y, así, facilitar su automatización y telecontrol, en algunos sectores.

Reducir la pérdida de agua

A través de las actuaciones del Plan RED del Canal de Isabel II se renovarán de un total de 3.000 kilómetros de conducciones hasta 2030. El objetivo de las obras no solo es evitar las posibles roturas de las tuberías de la red de suministro, sino también reducir al mínimo las pérdidas de agua. Según apuntan desde la empresa, "en los últimos 17 años, y gracias a la modernización de las infraestructuras, se ha logrado reducir el número de roturas en un 54". 

"Aunque cuando se producen incidencias en la capital son muy sonadas, pues en Madrid vive mucha gente que puede verse potencialmente afectada, en realidad la red de abastecimiento de la región es una de las que menos pérdidas de agua sufre por fugas y averías" defienden desde el Canal de Isabel II. "Está entre las más eficientes del mundo", añaden.