El calor del fin de semana tras las lluvias trae días propicios para sufrir alergia primaveral

Una mujer que sufre alergia
Una mujer que sufre alergia
EP
Una mujer que sufre alergia

El episodio de temperaturas anormalmente altas para la época puede terminar a partir de este lunes. El pronóstico dice que desde el martes bajarán las temperaturas hacia un ambiente más invernal, aunque algunas zonas mantengan el calor, pero lo que llega con fuerza es la alergia primaveral.

El mes de marzo en España ha comenzado con precipitaciones en gran parte del país. En los últimos días, se han registrado tormentas primaverales en buena parte del territorio con temperaturas suaves que van a ir aumentando en los próximos días.

Estas condiciones meteorológicas pueden contribuir de manera directa a la presencia de pólenes e incidencia de la alergia. La lluvia favorece el crecimiento de las plantas y el calor y el incremento de las horas de luz aumenta la concentración de los pólenes convirtiéndose en el cóctel perfecto para la explosión de la alergia.

Al producirse las lluvias, las gotas de agua y la humedad limpian la atmósfera y el ambiente arrastrando los granos de polen y otros agentes al suelo. Sin embargo, con el paso de los días, esa humedad sirve de nutriente para las plantas, aseguran en eltiempo.es

Por ello, los días de temperaturas suaves tras unas jornadas lluviosas durante el mes de marzo son en los que se pueden registrar niveles más elevados de pólenes intensificando los síntomas de alergia.

Además, hay que tener en cuenta que factores como la contaminación y el cambio climático tiene importantes efectos en la naturaleza, y por ello, sobre los alérgicos. En concreto, el calor y gases como el dióxido de carbono pueden producir cambios en la polinización y aumentar tanto la producción de polen como la virulencia de las proteínas que lo componen. Lo que agrava los síntomas de los alérgicos a pólenes.

Niveles de alergia en marzo

Tal y como se puede comprobar en la sección de Polen de Eltiempo.es actualmente, muchos puntos de España registran una presencia notable de pólenes. Unos índices que son especialmente elevados en provincias como Lérida, Zaragoza, Navarra, Guipúzcoa, Vizcaya, Álava y Granada de polen de alisos y cupresáceas.

Por su parte, los niveles de polen son moderados en La Rioja, Girona, Guadalajara, Madrid, Córdoba, Huelva, Cádiz y Málaga y moderados en el resto del país.

En las provincias del norte, son los pólenes de los alisos los que mayores problemas están causando a la población alérgica. Por el contrario, en las provincias de Andalucía donde los niveles se encuentran disparados, es la alergia al ciprés y a las ortigas la más extendida.

El mapa de las próximas semanas, con el episodio de calor reciente, aumentará intensidad de polen. No se descarta que algunos pólenes, propios de la primavera (como el de las gramíneas) pudiera adelantarse.

Marzo es un periodo de transición entre el invierno y el verano en el que muchas especies de plantas coinciden en su época de floración y por tanto de polinización. De este modo, las alergias a pólenes más comunes del mes de marzo son las cupresáceas, arizónicas y alisos.

Por ello muchas personas ya comienzan a sufrir síntomas de alergia importantes como es el picor de ojos y garganta, estornudos o toses, mermando en cierta medida su calidad de vida.

20minutos

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