La 'montaña rusa' térmica en este invierno y la segunda ola de gripe agravan el "efecto sinérgico" de las alergias y los virus

La alergia al polen es la más frecuente en España.
La alergia al polen es la más frecuente en España.
ARCHIVO
La alergia al polen es la más frecuente en España.

El calor de los últimos días llegado tras un episodio de lluvias es la combinación ideal para que se disparen los niveles de polen en el ambiente. Si a ello se suma la confluencia con la segunda oleada de gripe a las puertas de la primavera, las perspectivas para los alérgicos se complican. Los alergólogos ya están viendo en sus consultas pacientes con mayor sintomatología y advierten del "efecto sinérgico" entre los virus respiratorios y las alergias que afectan a las mucosas nasales: "La una predispone a la otra, se potencian mutuamente" y, en consecuencia, "los síntomas son más fuertes".

Según los datos recabados por la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), los niveles ambientales de pólenes son ya altos en siete provincias españolas: Barcelona, Madrid, Cáceres, Sevilla, Córdoba, Jaén y Murcia. En concreto, es el polen de las cupresáceas -cipreses, enebros y sabinas- el que empieza a irritar las fosas nasales de los alérgicos.

El jefe del servicio de Alergología del Hospital La Paz de Madrid, Santiago Quirce, reconoce a 20minutos que "los pacientes vienen con más síntomas", si bien el número de consultas no se ha incrementado puesto que estas vienen ya agendadas desde Atención Primaria. Aunque el polen de las arizónicas puede dispersarse en días soleados de enero y febrero, "en los últimos diez días, cuando ha subido un poco la temperatura tras haber llovido, hay mucho polen de árboles", corrobora el doctor.

Niveles de alerta por polen en el ambiente en España, a 14 de marzo de 2023.
Niveles de alerta por polen en el ambiente en España, a 14 de marzo de 2023.
SEAIC

Su colega, el jefe de Alergología del Hospital Severo Ochoa de Leganés (Madrid), Francisco Javier Seoane, sí señala que ha empezado a haber un incremento de los pacientes con patología respiratoria.

Desde eltiempo.es explican que las tormentas de la semana pasada, que favorecieron el crecimiento de las plantas, seguidas de un aumento de las temperaturas hasta registros primaverales y un incremento de las horas de luz durante el día, aumentó la concentración de los pólenes que tanto temen las personas alérgicas. Su responsable de Meteorología de este portal especializa, Mar Gómez, describe estas circunstancias como "un cóctel perfecto para la explosión de la alergia al polen".

Para esta semana se espera una "fluctuación" de temperaturas, tras el descenso del martes, los termómetros volverán a registrar valores por encima de los habituales para esta época del año y el jueves será un día "excepcionalmente caluroso", indica Gómez. 

El mes de marzo, a caballo entre el invierno y la primavera, se caracteriza por la presencia de polen de alisos, arizónicas y cupresáceas. La estacionalidad observada ahora "es la correcta" y no se ha adelantado, según los doctores consultados. Tras el polen de los cipreses y el plátano de sombra llegarán, ya en mayo, el de las gramíneas.

La meteoróloga de eltiempo.es detalla los datos que maneja: también son siete las provincias con niveles altos y medios de polen de alisos y ciprés en Álava, Guipúzcoa y Vizcaya, Navarra, Zaragoza, Lérida y Granada. "En Andalucía se prevé un aumento tras esta semana", precisa Gómez. Para esta primavera se espera que sea más calurosa de lo normal, "sobre todo el Este", avanza.

"El índice de los síntomas alérgicos estacionales viene condicionado por las circunstancias climáticas del invierno anterior. Si hay un invierno que ha llovido mucho y luego llega una primavera-verano con temperaturas suaves, esa es la peor combinación para los alérgicos, que se benefician de inviernos secos y primaveras y veranos con temperaturas altas que queman la vegetación, aunque eso no convenga a los agricultores. Normalmente, los peores días son los que prosiguen a la lluvia", explica Seoane. 

Confluencia con la gripe

Santiago Quirce explica que la actual segunda ola de gripe -ya en descenso, según los datos del Instituto de Salud Carlos III- agrava los síntomas de las personas alérgicas, y viceversa. "La alergia y las infecciones virales tienen un efecto sinérgico, la una predispone a la otra, o sea que se potencian mutuamente. No es raro que los alérgicos experimenten síntomas más fuertes cuando tienen un proceso viral", explica el alergólogo jefe de La Paz, al tiempo que pide tener "muy presente" que las personas asmáticas y alérgicas son más susceptibles a las infecciones virales y tienen más riesgo de complicaciones.

En este sentido, el doctor Seoane abunda en que "tanto la gripe como la alergia son causas de inflamación de las mucosas -bronquial o nasal-. El hecho de que confluyan los dos, agravan la intensidad de los síntomas. Este año, con la segunda ola de gripe, estamos viendo mayor número de pacientes que acuden a Urgencias comparado con años previos, si bien en años previos hemos llevado la mascarilla", señala. Seoane asevera que no es raro ver a los niños en colegios de Jaén con mascarilla para protegerse el polen. "Es una de las medidas de prevención más eficaces", sostiene. 

No es raro que los alérgicos experimenten síntomas más fuertes cuando tienen un proceso viral"

Aunque "a veces no es fácil diferenciar" los síntomas de un catarro de los de la alergia, los especialistas tienen en cuenta los antecedentes de los pacientes, si ha habido episodios similares en años anteriores y los relacionan con los niveles de polen en el ambiente. Con todo, sí hay síntomas como la fiebre o el dolor corporal que son predominantes de la gripe y no da la alergia, mientras que esta se caracteriza por secreciones líquidas nasales o picores.

Este solapamiento de cuadros respiratorios se diluye con la llegada del buen tiempo, en primavera, cuando la población comienza a hacer vida más en exteriores y disminuye el riesgo de contagio de virus. "Ahora estamos en un momento en el que todavía no se han acabado los virus y está entrando ya la alergia al polen de los árboles y, efectivamente, coinciden, pero cuando el tiempo empieza a ser más cálido, los virus pierden relevancia. Los virus son más del invierno y la primavera es la estación plenamente polínica", expone el jefe de Alergología de La Paz.

Para tratar la alergia, lo primero es que esta sea bien diagnosticada y, lo segundo, comenzar con antihistamínicos -fármacos bajo prescripción médica- orales, en spray o en colirio "lo antes posible", indica Quirce, que anota que los medicamentos de segunda generación ya no producen sueño ni interfieren en las capacidades de concentración o conducción.

Redactora '20minutos'

Periodista y portadista en 20minutos desde 2012. Empecé en la sección de Multimedia y de ahí he pasado por Redes, Cultura, Cierre y Mi Bolsillo. Desde hace cuatro años formo parte del equipo de Última Hora lidiando sobre todo con el coronavirus. Me gusta escribir de salud, ciencia, medio ambiente, educación y temas sociales.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento