Ciencia

Los reactores nucleares salvan a la humanidad en robots gigantes... ¿podrían existir los Jaeger de 'Pacific Rim'?

Actualmente hay un gran debate sobre la energía nuclear. Mientras Alemania cierra centrales nucleares para centrarse en otras vías de producción, otros abogan por lo contrario, clamando por aumentar la presencia de fuentes nucleares. Hablar de los pros y los contras de esta fuente de energía ha estado en alza, ya sea defendiendo que la dependencia de la energía nuclear es necesaria, o criticando que generan residuos que se han de almacenar en instalaciones especiales, lo que no es del agrado de muchas personas.

Este recurso energético también es habitualmente usado en la ficción para proporcionar cantidades ingentes de energía a, por ejemplo, máquinas gigantes que buscan salvar al mundo. Si a los detractores de la energía nuclear se les plantease un escenario donde la raza humana dependiera de robots movidos por energía nuclear para no extinguirse por culpa de la llegada seres interdimensionales ¿Se buscaría aumentar su producción? ¿Cambiaría su paradigma totalmente?.

La verdad es que una peli en la que robots gigantes se pelean contra extraterrestres ya es una trama que llama la atención. Nos encanta ver máquinas enormérrimas con mecanismos enrevesados y planos de cámara espectaculares enfrentándose a seres gigantes que han aparecido de repente y amenazan con exterminar a la humanidad con oleadas de ataques brutales. Ya sea por lo impresionante de las escenas o lo absurdo de tal escenario, merece la pena verlo.

Han pasado casi diez años del estreno de una de las películas más sonadas del género mecha en esta época moderna Pacific Rim, en la que la humanidad las pasa realmente canutas contra unos seres alienígenas provenientes de otra dimensión.

Pacific Rim ya tiene una década.
Warner Bros. Pictures

El film comienza en 2013, cuando unos enormes monstruos llamados Kaiju comienzan a emerger de un portal interdimensional en el fondo del Océano Pacífico y atacan las ciudades costeras. En respuesta, la humanidad construye enormes robots llamados Jaegers, cada uno copilotado por dos o más personas que comparten un vínculo mental para dividir el estrés mental de pilotar la máquina.

La primera pregunta es lógica, ¿por qué usar Jaegers? Porque la sangre de los Kaijus es altamente tóxica tanto para la Tierra como para los humanos. Contamina el entorno donde un Kaiju resulta herido o muerto. Además no es sólo un líquido que impregna el lugar donde se esparza, sino que cuando el Kaiju comienza a descomponerse, su sangre se convierte en un vapor, denominado "niebla de sangre". que se extiende por toda la zona circundante. La naturaleza de la sangre Kaiju le permite manchar cualquier cosa, especialmente la piel humana. Aunque los humanos utilicen máscaras respiratorias para protegerse, pueden infectarse o envenenarse.

Por eso no se puede mandar ningún tipo de arma como una bomba o un ejército a combatirlos, ya que la cantidad de bajas por daño colateral sería cuantiosa. Es ahí cuando se decide crear unos seres humanoides de más de 50 metros con armas blancas del tamaño de camiones de reparto para enfrentar cuerpo a cuerpo a los kaijus. No hay fallas en esa lógica. Un diez de diez en estrategia militar.

Lo que es innegable es que los Jaegers son un monumento de la ingeniería. Al igual que los trajes de Iron Man donde Tony Stark enumera las nuevas versiones como Mark y un número (Mark 1, Mark 2, etc.), la etiqueta "Mark" asignada a cada Jaeger hace referencia al calendario de lanzamiento. En 2015 se desplegaron seis Mark-1, seguidos de los Mark-2 en 2016 y los Mark-3 en 2017. Los Jaegers Mark-4 y Mark-5 fueron los últimos producidos en 2018 y 2019.

Todos los Jaegers Mark-1 a Mark-3 utilizaban reactores nucleares, una fuente que proporcionaba gran cantidad de energía pero, como daño colateral, la probabilidad de desarrollar cáncer de los pilotos era alta. Los Mark siguientes al 3 disponían de otro tipo de tecnología evitando así la exposición a tanta radiación. Ajeno a este último dato, lo interesante es ver si la energía nuclear podría mover estos mostrencos tan innovadores. ¿Los Jaegers serían viables?

El género Mecha, vital en 'Pacific Rim'

Godzilla, Mothra o los mismísimos villanos de los Power Rangers son seres que amenazan con exterminar la humanidad y la cualidad que más les caracteriza es que son gigantes. Desde hace muchos años tenemos películas donde una gran amenaza se combate con un gran arma. Cómo no, Pacific Rim bebe de esa fuente dando unas peleas espectaculares.

Anime 'Neon Génesis Evangelion'.
Gainax Tatsunoko Production

El propio director y guionista de la película, Guillermo del Toro y Travis Beacham respectivamente, afirman que el concepto de los Jaegers fue inspirado por el género mecha de animes como como Mobile Suit Gundam, Tetsujin 28-go, Ultraman y The Big O. Es innegable la influencia de este género, ya que las peleas de Gipsy Danger contra los Kaijus reviven al niño interior de muchos espectadores rememorando películas de la década de los 70 y 80, que compaginan perfectamente con otras obras más cercanas a los 90 y los 2000 como Neon Génesis Evangelion, Tengen Toppa Gurren Lagann o Macross. Pacific Rim es el género mecha llevado a Hollywood en su máximo esplendor.

La energía nuclear, motor de los Jaegers

Una máquina tan grande, que consume tanto y que requiere de una barbaridad de potencia, con la tecnología que tenemos a día de hoy es normal que use energía nuclear.

Las centrales nucleares utilizan combustible de uranio poco enriquecido para producir electricidad mediante un proceso denominado fisión, donde se dividen átomos de uranio en un reactor nuclear. El combustible de uranio consiste en pequeñas pastillas cerámicas duras empaquetadas en tubos largos y verticales.

Una sola de esas pastillas, ligeramente mayor que un guisante, contiene la misma energía que una tonelada de carbón. Pero usar esta energía tiene una consecuencia, ya que se produce una cantidad de residuos, pequeños en comparación a la cantidad de energía producida. Por término medio, los residuos de un reactor que cubra las necesidades de electricidad de una persona durante un año serían del tamaño de un ladrillo. Sólo cinco gramos son residuos de alta actividad, es decir, lo mismo que una hoja de papel.

Central nuclear de Ascó
EUROPA PRESS

Lo ideal sería una fuente de energía que pudiera proporcionar esa potencia sin esos residuos, y precisamente es en lo que se está trabajando desde hace años. El ITER (Reactor Termonuclear Experimental Internacional en inglés) es un megaproyecto internacional de investigación e ingeniería de la fusión nuclear cuyo objetivo es crear energía mediante un proceso de fusión similar al del Sol. Se considera que será el mayor experimento de física de plasma de confinamiento magnético del mundo y el mayor reactor experimental de fusión nuclear tokamak.

A diferencia de la fisión, la fusión nuclear es el proceso mediante el cual dos núcleos atómicos ligeros se combinan para formar un solo núcleo más pesado emitiendo al mismo tiempo enormes cantidades de energía elevadísimas, en torno a cuatro veces más que las reacciones de fisión, además de no generar residuos nucleares radiactivos de larga duración y tampoco tener riesgo de accidente nuclear porque la producción de energía de fusión no se basa en una reacción en cadena.

Los Jaeger en perspectiva

El Jaeger protagonista del film Pacific Rim, Gipsy Danger, es una máquina de 2.000 toneladas movida por un reactor nuclear que, en una escena, pelea contra el kaiju Leatherback durante aproximadamente dos minutos y cincuenta segundos del film. Tomando esto como referencia fijamos que, como mínimo, el Gipsy Danger puede mantenerse activo ese periodo de tiempo con energía nuclear.

Un jaeger en pleno combate.
Warner Bros. Pictures

En nuestro país tenemos siete reactores nucleares operativos, Almaraz I y II (Cáceres), Ascó I y II (Tarragona), Cofrentes (Valencia), Trillo (Guadalajara) and Vandellós II (Tarragona). Cada uno de ellos, aproximadamente, proporciona 1,05 GW de potencia. Eso quiere decir que si Gipsy Danger portase uno de estos reactores nucleares tendríamos que la energía que le proporcionaría durante 2 minutos y 50 sería tal que le permitiría correr a una velocidad de 1.521 km/h sin parar. El problema es que no es tan simple, ya que en la película le vemos correr, saltar y meter puñetazos. Contra Leatherback, Gipsy Danger realiza un salto tal que casi supera la altura del Kaiju, de unos 80 metros. Sabiendo que está en el aire 3 segundos podemos estimar que la velocidad con la que salta Gipsy es de 309 km/h. La energía necesaria para poder levantar las 2.000 toneladas que pesa el robot no sería ni del 3% de la que proporcionaría el reactor nuclear. Ese es el potencial energético del que dispone el Gipsy Danger, aunque el concepto de androide gigante bípedo sea el que hace que la idea sea una completa insensatez.

No es una locura ver cómo un reactor nuclear mueve monstruos de la ingeniería. Un buen ejemplo es uno de los portaaviones más caros realizados hasta la fecha por el ejercito de los EE UU, el Gerald R Ford, que porta dos reactores nucleares A1B y que además cuesta la friolera de 13.000 millones de dólares. Si eso cuesta un portaaviones imaginad lo que costaría producir un Jaeger.

Está claro que en ambos casos la ingeniería de ambas armas es alucinante, con la diferencia de que el portaaviones está operativo y los Jaeger esperemos que no y, si se crean, mejor que sea sólo como exposición, como el gran Gundam de 20 metros expuesto en el puerto de Yokohama en Japón.

Este Gundam en concreto mide 18 metros de alto y se encuentra en la puerta del Centro Comercial Lalaport.
Getty Images

Puede que estos monstruos tecnológicos no sean la mejor baza para abogar por energía nuclear, pero ojalá nunca tengamos que usarlos contra los Kaijus. Igual no nos iría tan bien.

Referencias

Cálculos generales

Cálculos generales.
Rubén Sierra
Científico y divulgador en GarunaEffect

Soy graduado en Física e Ingeniería Electrónica con un máster en Ciencia y tecnología espacial, además de ser uno de los fundadores y divulgadores científicos de Garuna Effect, asociación de divulgación científica con la que hemos sido galardonados con el XVI Premio Creadores 20minutos por nuestro trabajo divulgativo en redes. Enamorado de la viñeta desde mi infancia, dibujo tiras cómicas y otros cómics como pasatiempo. Compagino mi labor como divulgador siendo profesor, coordinador de eventos y comentarista de pro-wrestling. Aprovecho mis dotes comunicativas en mi faceta como cómico, con experiencia desde hace más de 10 años, siendo premiado con diversos premios en el panorama nacional.

loading...