El Partido Popular cree que "los líos" internos que atraviesa Unidas Podemos a cuenta del nuevo proyecto político de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, les ofrece una oportunidad electoral. "Todo lo que sea que se sigan pegando nos ayuda a ejemplificar que somos diferentes", sostienen fuentes del PP, que aun así mantienen su objetivo electoral de arrebatar un millón de votantes "desencantados" con Sánchez. 

En Génova confían en asegurarse los 800.000 votos que dicen haber 'robado' a Sánchez y llegar al millón de cara a las generales, ya que dudan de que el votante del PSOE pueda decantarse por la líder de Sumar, que militó en el Partido Comunista. Según calculan los populares, la división en la izquierda y el "hartazgo del sanchismo" daría como resultado un trasvase de votos al bloque de la derecha.

Así, los populares insisten en que la división en el bloque de la izquierda no tiene repercusión negativa para la derecha. En todo caso, lo contrario. El portavoz de campaña, Borja Sémper, ha reconocido en rueda de prensa que "es probable" que le venga bien al PP en las elecciones. "Pero estamos más preocupados por las cosas del comer", ha apuntado en contraposición con lo que en su opinión representan los actuales dirigentes del Gobierno. "Más allá de políticos con capacidad para hacerse buenos selfis, políticos molones y que buscan hacerse la foto enrollada, lo que los ciudadanos premian son respuestas a sus problemas. Cuando uno está más preocupado por su ombligo, los ciudadanos le responden dándole la espalda".

Para el principal grupo de la oposición, el proyecto que presentó este domingo la también ministra de Trabajo puede causar un "roto" tanto para el PSOE como para Unidas Podemos. Así, Sémper advierte a Pedro Sánchez de que tenga "cuidado con las marcas blancas", así como con la "preocupación de sus barones socialistas por la diatriba" del presidente y la "política tóxica que ha instaurado en España". Y al fundador de Podemos, Pablo Iglesias, el dirigente popular le augura una "semana de pasión", en referencia a la Semana Santa y la falta de acuerdo entre Podemos y Sumar para concurrir juntos a las elecciones.

Por ello, Sémper ha denunciado que el Gobierno llegó al fin de semana "siendo bipartito y ha acabado en tripartito", dado que al PSOE y a Unidas Podemos se añade desde el domingo la candidatura Sumar, una situación que ha provocado, según el portavoz, que esta legislatura esté "liquidada desde hace meses porque el Gobierno ha sido incapaz de gobernar y de resolver los problemas de los ciudadanos". Pese a ello, asume que Pedro Sánchez no adelantará las elecciones. "Tengo esa intuición, aunque eso fuera lo mejor para España".

El PP se ofrece como alternativa a un Gobierno "más preocupado en repartirse los restos del naufragio que por resolver los problemas de la gente". Tal y como ha expresado Sémper, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, es quien ha sido capaz de "demostrar" a un año de su llegada a Génova que "es posible una política mejor para nuestro país" porque "España necesita un liderazgo nuevo y salir de esta etapa gris, oscura, bronca y enfrentada".