El abogado Rodríguez Menéndez, en el juicio por la supuesta estafa en una compraventa de petróleo: "No recibí ni una sola peseta"

El abogado Emilio Rodríguez Menéndez ha asegurado en el juicio por una presunta estafa a cuatro personas en una operación de compraventa de petróleo que él no recibió "ni una sola peseta de esos señores", sino que fue "al revés", y ha negado que ejerciera como su abogado porque entonces él estaba suspendido. 

Por su parte, los denunciantes han mantenido que el famoso abogado, del que desconocían que entonces estaba inhabilitado, les engañó, ya que le dieron un total de 103.700 euros, en mano y sin recibir justificantes, pero ni llevó acabo el negocio ni les devolvió el dinero.  

La Audiencia Provincial de Madrid celebra este martes el juicio al famoso letrado, que está acusado de ofrecer un negocio falso de compraventa y suministro de petróleo en Argentina mediante la empresa YPF. La Fiscalía pide que sea condenado a cuatro años de prisión y a que indemnice a las cuatro víctimas con 73.700 euros.

El juicio y sus aplazamientos

El juicio se ha celebrado tras tres aplazamientos desde 2021 y Rodríguez Menéndez ha vestido la toga de letrado. Una vez finalizada su declaración, el acusado ha solicitado a la Sala ejercer como abogado para preguntar a los testigos, pero el presidente del tribunal lo ha denegado porque no lo había solicitado antes.

Rodríguez Menéndez ha declarado enérgicamente defendiendo su inocencia, y ha pedido en varias ocasiones a los intervinientes que hablasen en voz más alta porque no oye bien. 

Al inicio del juicio el presidente de la Sala, Jacobo Vigil, se ha dado cuenta de que había participado, en la fase de instrucción del proceso, en la redacción de un auto que rechazó un recurso de la defensa de Rodríguez Menéndez en el que esta parte pedía que la causa se juzgara en Argentina. Por eso ha propuesto que le sustituyese otro magistrado y así lo ha hecho el juez Ricardo Rodríguez Fernández. 

Declaración de Rodríguez Menéndez

Durante su declaración, el acusado ha reiterado en varias ocasiones que él no recibió "ni una sola peseta de esos señores", "ni un duro", "jamás", sino que fue "al revés", ya que él gastó dinero en invitarles a viajes y otras actividades. "Se han aprovechado ellos de mí", ha sostenido. 

También ha dicho que él no fue su abogado ni su representante legal, ya que llevaba 12 años viviendo en Argentina y había sido suspendido como letrado en España, lo que era "público".

Ha relatado que él invitó en 2014 a la inauguración de un despacho a la mujer de un amigo que había fallecido y allí el hijo de ésta le preguntó si él podría asesorarle para emprender un negocio de compraventa de petróleo en Argentina, pero él no llegó a hacerlo, ya que ni podía ni era una idea viable.

Y ha reiterado que los denunciantes "no tenían solvencia de ninguna clase", y lo que pretendían era invertir 120.000 euros para ganar dos millones de dólares, lo que era "absurdo".

Denunciantes

Por su parte, los denunciantes han coincidido en que el acusado fue el que les propuso ser su representante legal para abrir un negocio rentable en Argentina, debido a la amistad que tenía con el padre de uno de ellos, y ya que él conocía a la presidenta de aquel país.

Se fiaron de él por esa amistad, sin saber que estaba inhabilitado como abogado, hasta que comenzaron a sospechar porque no les daba recibos ni veían avanzar el negocio.

Los cuatro denunciantes han precisado que Rodríguez Menéndez les pedía entregar el dinero en persona y en efectivo, primero para constituir una sociedad y luego para agilizar los trámites. Ha explicado que cuando comenzaron a denunciarle, Rodríguez Menéndez les respondió con denuncias y querellas.