La cantante barcelonesa Rosalía actuó este sábado en uno de los festivales de música más famosos del mundo, el de Coachella, en pleno desierto californiano, y como acostumbra, deslumbró a las decenas de miles de asistentes con un show cargado de espectáculo.

Flanqueada por dos filas de bailarines vestidos de negro y cubiertos con cascos de moto, la cantante barcelonesa accedió al escenario con un casco personalizado, con luces de neón, que se quitó mientras caminaba entre el cuerpo de baile.

Ataviada con una camisa de gasa blanca de grandes transparencias y cuero negro en su interior, Rosalía abrió el show con la interpretación de Saoko, una de las canciones de su disco Motomami.

La potencia de la entrada de la artista española no pasó desapercibida en redes sociales: "Por muchos números que hagan los demás nadie llega a Rosalía, España debería estar orgullosa", escribió un internauta que compartió en Twitter el vídeo del inicio del show.

"Qué entrada tan potente", "Qué orgullo de tía", "Qué petardazo" o "Menudo poder" son los comentarios de otros tuiteros que quedaron impresionados por la espectacular actuación inicial de Rosalía en Coachella.

En la edición de este año, además, Rosalía contó en el escenario con la presencia de su pareja, el reguetonero Rauw Alejandro, con el que interpretó Vampiros y Beso.